El Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU) relanzó la campaña de adopción “Su futuro depende de tu amor”. En el marco de la celebración del Día Nacional de la Adopción, el presidente del instituto, Pablo Abdala, explicó que se “inicia esta nueva fase de impulso de comunicación de información y de sensibilización” de la campaña, que fue iniciada hace seis meses.

“Lo que no estaremos en condiciones nunca de hacer desde el Estado y, por lo tanto, desde el INAU, es proporcionar un derecho que no estamos en condiciones de otorgar. Porque sólo la institución familia es la que nos puede proporcionar el derecho a vivir en familia”, dijo Abdala.

La realidad actual

“Su futuro depende de tu amor” fue creada con el fin de impulsar las adopciones de niños entre cinco y diez años, que actualmente son 145, según compartió la directora del Área de Adopciones, Valeria Caraballo. Los chicos de esa franja etaria son los menos integrados a familias porque, según dijo Abdala, “a partir de los cinco años las cosas empiezan a complicarse por razones inherentes a la condición humana y a los temores e incertidumbres que todos los seres humanos tenemos”. Hoy en día hay 545 niños en condición de adoptabilidad en el INAU, de los cuales 40 o 50 son de primera infancia, es decir menores de cinco. Hay más de 400 niños de 11 a 18 años en condiciones de adoptabilidad.

El año pasado se lograron 151 integraciones, número récord, dijo Abdala, quien agregó que en esta primera etapa de 2023 se parece “confirmar esa tendencia” porque, hasta el 31 de marzo, se efectuaron 49 integraciones este año, de las cuales 13 incluyeron a niños mayores de cinco años.

Caraballo explicó que el proceso de adopción de los niños más grandes es más largo y acompañado por parte de los técnicos del área de adopciones -Abdala habló de 30 técnicos, incluyendo trabajadores sociales y psicólogos-. En cambio, sostuvo que con niños más chicos, por ejemplo, se hace un par de visitas, una adaptación y rápidamente pasa a residir con los futuros padres adoptantes. Abdala agregó que la primera etapa en la adopción es la de valoración de los 18 meses, en la que intervienen duplas de técnicos que trabajan con las familias para incorporarlas al Registro Único de Aspirantes. Luego viene la integración a la familia y el seguimiento al año, que se trabaja con otras duplas. Finalmente, una vez que se confirma que el niño se integró completamente, se da la adopción plena.

Otra es la mirada de la Asociación de Padres Adoptantes del Uruguay (APAU), que advierte que las etapas de estos procesos no están funcionando como deberían. Aurora Reolón, integrante de la asociación, mencionó, en diálogo con la diaria, la falta de técnicos como causa principal de la saturación del sistema y dice que aquellos técnicos que sí están trabajando “están sobregirados”. “¿Cuántas visitas pueden hacer? ¿Cuántos seguimientos pueden hacer? ¿Cuánta cabeza le pueden poner a cada caso si tienen 10 o 12 casos cada uno?”, preguntó.

Asimismo, Reolón también habló de la falta de capacitación de algunos de los técnicos: “El haber pasado por la Facultad de Psicología no los habilita a nada, no les saca preconceptos”. Agregó que, aunque se contraten nuevos técnicos, “es como un caño roto: te entran por un lado y se te escapan por otro, porque la gente se satura”.

¿Cómo seguir?

En esta nueva etapa, la campaña mostrará diversos testimonios reales de familias que han incorporado niños de estas edades, así como se utilizarán contenidos publicitarios y se harán reuniones informativas en los 19 departamentos del país.

Asimismo, siguen habilitadas las líneas de comunicación a través del teléfono o el correo electrónico. Abdala comentó que más de 100 familias se han contactado con el departamento por estas vías y que “algunas de esas familias están en proceso de avance en cuanto a la alternativa de que efectivamente puedan concretarse integraciones que involucren a niños de más de cinco y de más de diez años”.

En estos meses también se ha trabajado en descentralizar las adopciones de Montevideo y trabajar más en la ayuda a los otros departamentos.

El presidente del INAU explicó que hay muchas familias que tienen una disposición inicial de considerar la posibilidad de adoptar niños más grandes, pero que luego les surgen dudas y miedos con respecto a que el niño ya es consciente de su realidad. Los chicos de más de cinco años “saben que están a cargo del Estado, saben que han roto vínculos con su padre, con su madre o con sus referentes afectivos más directos y saben que esa familia que puede llegar a hacerse cargo de ellos no es su familia de sangre”. Luego explicó que, al momento de ver los resultados, los procesos terminan siendo hasta igual de exitosos que las integraciones de los demás niños.

Respecto del sistema de adopciones, Abdala dijo: “No voy a decir que está resuelto, porque nunca se resuelve definitivamente, pero está mucho mejor que cuando empezamos nuestra gestión”.

Sin embargo, la integrante de APAU opinó diferente y sostuvo que, “en realidad, no mejoró nada, porque seguimos esperando tres años y medio para adoptar. Seguimos teniendo problemas de duplas, seguimos teniendo problemas de que no nos pueden hacer los seguimientos, seguimos teniendo el problema de que las familias a veces están solas durante mucho tiempo”.

La LUC y sus cambios

En los artículos 403 a 406 de la ley de urgente consideración (LUC) se plantearon una serie de cambios en el régimen de adopciones, con el objetivo de agilizar los trámites de integración familiar. Abdala dice que esos artículos fueron determinantes para los números de 2022, pero Reolón opina que “lo que hizo esta mamarrachada de la LUC fue acelerar el proceso de la valoración, lo cual perdió en calidad, porque los talleres son más cortos, porque antes eran seis y ahora son cuatro”.