Juan Castillo: “Que la clase obrera no termine votando a un partido político que defiende a los patrones”

En el camino que empezó a recorrer el Frente Amplio (FA) tras la aprobación de sus bases programáticas y de cara a la discusión de su congreso a fin de año, se sucederán varias instancias departamentales para estudiar y hacer aportes al documento base.

Tal es el caso de la Conferencia Departamental de Canelones del Partido Comunista del Uruguay (PCU), que tuvo su inauguración este viernes en La Huella de Seregni. Si bien estaba previsto que participaran los dos precandidatos que encabezan las primeras encuestas, Yamandú Orsi y Carolina Cosse, la intendenta de Montevideo no pudo asistir debido a una situación familiar.

En la mesa se encontraba el secretario general del PCU en Canelones, Daniel Diverio, que caracterizó el “escenario complejo en América Latina” y a nivel nacional, algo que en esta última instancia “no debería sorprendernos de un gobierno herrerista”.

“Este gobierno sí estaba preparado”, ironizó. “Estaba preparado para llevar a cabo un brutal ajuste de cuentas contra el pueblo” que trajo aparejada la “pérdida salarial para la mayoría de los trabajadores privados y la totalidad de los trabajadores públicos”. Con este mar de fondo es que desde la Departamental de Canelones “estamos convencidos de que la forma de confrontar con este modelo de país es dar la discusión en los lineamientos programáticos para aportar a la discusión” con “contenido humano y convencido de una discusión política profunda”, remarcó.

La presidenta de la Departamental frenteamplista, Susana Muñiz, fue en la misma línea, y apuntó a la “construcción” de “la herramienta de la unidad”. “Este partido se encargó de delinear los ejes de la unidad de la clase obrera y de la izquierda”, enfatizó.

Asimismo, remarcó la importancia de “salir a difundir nuestro programa, a conversar y a estar dispuestos a modificarlo, a hablar con la ciudadanía”. Afirmó que en el país “que todas y todos nos merecemos”, “Canelones tiene un lugar muy importante”.

Orsi, por su parte, dijo asistir “con el orgullo de pertenecer al FA y participar de una instancia del PCU”, al tiempo que llamó a “poner valor a nuestra buena gente”, puesto que “sobre la buena gente se construyen cosas, que es la esencia de ser de izquierda”, y remarcó la importancia de “la unidad de la fuerza política, de este pueblo”, con un PCU “que ha sido protagonista siempre, con planteos que apostaron a la unidad, que empezó a mediados de los 60 con la unidad de la central sindical”.

En este sentido, y continuando con la idea de la unidad, Orsi reflexionó que “viene bien bajar la pelota y mirar para el costado, las historias de nuestros grupos, nuestras barras, nuestros partidos y las peripecias personales que fueron construyendo esas realidades que se transforman en listas, meterle a la ideología el corazón y la experiencia concreta”.

“Que palabra de bien camarada, porque no sólo suena bien sino que es inclusiva por definición y en femenino, me siento muy cómoda saludándolos como ‘queridos camaradas’”, comenzó su alocución la senadora Silvia Nane, en representación de Cosse.

“Es esperanzador pensar que uno puede ser parte de la construcción de alternativas, sentirse parte de eso que nos trasciende: un proyecto político, y ese es el aporte que vamos a hacer todos de acá a noviembre”, agregó. Destacó la “diversidad” de Canelones, que lleva a una “diversidad de comunidades que nos hace, en definitiva, repensarnos en términos de cómo vamos a hacer para construir”.

En estos días, señaló, “se ha dado bastante la conversa sobre los desafíos en el mundo del trabajo que puede tener la irrupción de la inteligencia artificial, hemos conversado mucho y en lo poquito que hemos podido avanzar la disrupción grande es que construyamos mejores comunidades”.

“El impacto de todas estas nuevas tecnologías va a ser diferente en el marco de estas comunidades con lazos humanos, eso es parte de lo que estamos construyendo desde Canelones, todo el partido y el FA, cada quien desde su lugar”.

El presidente de la fuerza política, Fernando Pereira, reiteró algunos de los conceptos que vertió en su discurso en Florida, y comenzó por la idea de “que cuando un programa se construye en un mes y medio son fuegos artificiales, programas que se construyen para después no cumplirse”, y por el contrario, el FA “está construyendo programa hace un año”.

“Tal vez la memoria falla, lo que cambió Canelones con el gobierno del FA, desde Marcos Carámbula para acá, no tiene goyete”, acotó. “Hay un desafío grande que es cambiar el gobierno del espejo por el de las transformaciones, pensar en un Uruguay cambiante que va a demandar estos debates” que a su vez “tienen que estar dentro de nuestras posibilidades”.

Consideró que “el programa es un disparador, es donde poder aceitar las líneas de pensamiento”, y remarcó la necesidad de soñar con “el Uruguay, no cómo nos va a ir sectorialmente, sino cómo nos va a ir a todos”.

Pereira destacó que hay “una experiencia, una acumulación” de gobierno en el FA y que “este pueblo no merece otro gobierno del lacallismo”. “Tenemos que tener una alternativa a los candidatos del lacallismo, estos espacios van a construir un programa nacional y un programa departamental en cada uno de los lugares”, sentenció.

El secretario general a nivel nacional del PCU, Juan Castillo, entendió que si bien “está todo muy lindo decir que tenemos la posibilidad cierta de tener gobierno”, eso “se hace con militancia, los cambios se militan, y para transformar en realidad los sueños es que tenemos que saber fortalecer los organismos”.

En este sentido, se necesita “que el partido sea una cosa viva, y no tenemos sentido vergonzante de decirlo, porque el PCU, con toda la gente que tiene y que ha venido, todavía está lejos de tener el tamaño que necesita”.

La otra forma es “contribuir a los programas”, porque este es “el año de la discusión programática”. Entonces, el orden de prioridades para Castillo es “primero, la fortaleza de la unidad, de la estructura orgánica de nuestra fuerza política; después, la construcción de un programa para los cambios, y después las candidaturas”.

“Estas bases programáticas, elaboradas desde hace más de un año por 32 unidades temáticas que juntaron casi un millar de propuestas de militantes, compañeras y compañeros comprometidos con los cambios, que no se las vienen de sabiondos”, es “distinto a un pacto electoral que sólo quería sacar al FA del gobierno y no tenía programas”, agregó.

“Que la clase obrera no termine votando un partido político que defiende a los patrones; construir y forjar la unidad y la firmeza del pueblo, no nos quedemos solamente con las encuestas, hay que militar con unidad, con mucha amplitud, hay que debatir como sabemos los comunistas”, convocó.