Las elecciones nacionales del pasado 27 de octubre dejaron al herrerismo con un solo representante en la Cámara de Senadores, que será una vez más Luis Alberto Heber, y con apenas dos bancas en la Cámara de Diputados. Cinco años atrás, este histórico sector del Partido Nacional (PN) había obtenido dos senadores y seis diputados. Entre una elección y la otra, la lista al Senado del Herrerismo perdió alrededor de 68.000 votos.

Este lunes, en la casa central del herrerismo en Montevideo, donde tuvo lugar una asamblea del sector, el ambiente no era de derrota. “Todos nos daban muy chato y acá estamos, parados y prontos para dentro de un par de semanas meterle y volver a ganar”, manifestó Adriana Balcárcel, edila de Montevideo y dirigente herrerista. “¿Y por qué ganar? Porque si no, hipotecamos cinco años de nuestras vidas”, resaltó.

Posteriormente fue el turno de Heber. “¡No te sacan más!”, le gritó, tres veces y en broma, un militante herrerista cuando agarró el micrófono. El senador electo, que ha estado en el Parlamento de manera ininterrumpida desde 1985, sostuvo que “tener la presidencia de la República es fundamental para el país”. Luego, dijo que tendrán que “trabajar mucho para conseguir las mayorías, que no son imposibles”, en referencia a que la coalición será minoría en ambas cámaras en la próxima legislatura.

Heber recordó que durante el gobierno de Luis Lacalle Herrera (1990-1995), el PN perdió las mayorías parlamentarias “al año y medio” y, sin embargo, “gobernó”. Señaló que, en caso de que la coalición mantenga el gobierno pero no consiga los votos suficientes para aprobar el presupuesto nacional, “sigue el presupuesto que tenemos vigente y que fue armado por nosotros en este gobierno”.

Heber apuntó que lo mismo aplicaría para los directorios de los entes autónomos: “Siguen los nuestros conduciendo las empresas públicas, los que hemos designado nosotros en este gobierno; son ellos los que tienen el problema”, expresó, en referencia al Frente Amplio.

De todos modos, Heber también dijo que el sistema político deberá “buscar” y “encontrar” oportunamente las mayorías parlamentarias y, en ese sentido, sostuvo que el candidato del PN, Álvaro Delgado, “es articulador”. “Parecería que el destino nos pone en una situación donde justamente tenés que tener un presidente que sepa dialogar, ceder, negociar, que encuentre lo principal y saque lo accesorio para conseguir las mayorías”, expresó.

El herrerismo “sigue estando en pie”, afirmó Heber

En 2019, en alianza con Mejor País, el herrerismo obtuvo 154.083 votos, 22% de las adhesiones nacionalistas, dos lugares en el Senado y seis bancas en Diputados. Semanas después, el sector sumó la conducción del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, a partir de la designación de Heber, que implicó, a su vez, el ascenso al Senado de Gustavo Penadés. Desde ese lugar, posteriormente, Penadés empezó a trabajar por la precandidatura a la presidencia de Laura Raffo.

Pero luego el panorama cambió drásticamente. En octubre del año pasado, Penadés fue imputado con prisión preventiva por múltiples delitos de explotación sexual de menores de edad. Un mes después, Heber, ya al frente del Ministerio del Interior, renunció a su cargo debido al escándalo por la entrega del pasaporte uruguayo a Sebastián Marset.

Luego de las elecciones internas, en las que Raffo obtuvo 19% de los votos del PN, el herrerismo perdió a varios dirigentes, como el diputado Sebastián Andújar, la senadora Gloria Rodríguez y la propia Raffo. Estos movimientos demandaron el regreso a la política partidaria del expresidente Lacalle Herrera y propiciaron un acuerdo electoral con el senador Juan Sartori. De acuerdo al conteo definitivo de la Corte Electoral, el herrerismo obtuvo en estas elecciones 86.026 votos, esto es, 13% de los votos del PN. Las listas de Sartori aportaron unos 14.600 votos.

Consultado al respecto por la diaria, Heber señaló que “hay partidos que tenían tres senadores, como el caso de Cabildo [Abierto], y ahora no tuvo ninguno”. “Lamentablemente lo digo, pero comparándonos con lo que les ha pasado a otros partidos, la votación del herrerismo sigue estando en pie y estamos muy bien parados como para poder crecer en el futuro”, afirmó.

Según Heber, el herrerismo ha tratado de “tener una renovación en los cuadros”. No obstante, sostuvo que los procesos de renovación conllevan “tensiones”, porque “a la gente que hace mucho tiempo que está le cuesta dar un paso al costado para habilitar a los nuevos dirigentes que están saliendo”. “El herrerismo está fuerte y está renovado, y pronto para trabajar por el país”, subrayó.