La titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Azucena Arbeleche, presentó este miércoles los números macroeconómicos de 2023. La jerarca aseguró que se registró un crecimiento del salario real y un aumento en la cantidad de puestos de trabajo. Además, afirmó que “hay un quiebre en la forma de hacer política económica”, dado que anteriormente “cada gasto se solventaba con más impuestos”.

Consultado por la prensa, el expresidente del Banco Central del Uruguay (BCU) y actual senador y precandidato del Frente Amplio (FA) Mario Bergara sostuvo que Arbeleche “elige un relato con base en las variables que ella entiende [que] son favorables para el gobierno”. Dicho esto, apuntó contra el atraso cambiario, que “es el más grande del siglo XXI”, y contra el déficit fiscal, que “deja mucho que desear”.

“El dólar está en el sótano ante la pasividad del gobierno y el BCU, que vieron cómo en todo este tiempo bajó de 43 a 39 pesos sin atinar a hacer absolutamente nada, [esto] sobre la base del fundamentalismo de mercado”, afirmó Bergara. A su entender, se trata de “un error de política económica”, dado que el BCU “perfectamente” podría “corregir ese tema” mediante “intervenciones modestas en el mercado cambiario, teniendo en cuenta que el BCU tiene una gran espalda financiera”.

En cuanto a las cuentas públicas, Bergara estimó que probablemente “el cierre de este gobierno” no tendrá “un panorama muy diferente al de 2019”, último año de gobierno del FA. De hecho, afirmó que “hay un conjunto de gastos”, sobre todo, “aquellos vinculados a inversiones en infraestructura”, que no están siendo registrados debidamente y, por ende, “el verdadero gasto de 2023 es más alto que el que se registró”. “No hay un cumplimiento de la regla fiscal y el resultado deja mucho que desear, sobre todo considerando que fue el factor obsesivo de la política económica”, expresó.

Bergara criticó que “hubo metas de la regla fiscal que se modificaron a mitad de año”, porque, de lo contrario, “no se iban a cumplir las que se fijaron al principio del año”. En ese sentido, fustigó: “Si uno corre el arco, le va a embocar siempre”.

Una presentación “parcial” y “autocomplaciente”

En diálogo con la diaria, Pablo Ferreri, exsubsecretario del MEF (2015-2020) y actual coordinador de la Comisión de Inversiones de la Intendencia de Montevideo, consideró que la exposición de Arbeleche fue “parcial”, carente de “una mirada integral de la economía uruguaya” y, “obviamente, eligiendo algunos datos y dejando afuera otros”.

A modo de ejemplo, señaló que, “durante más de una hora de presentación”, Arbeleche no hizo alusión alguna al “atraso cambiario más importante de los últimos 25 años que tiene Uruguay”. Tampoco, sostuvo, “se habló de productividad, de competitividad, de cómo mejorar la pobreza infantil o la desigualdad, aspectos que son muy importantes”.

Ferreri manifestó que “lo que más preocupa” es la ausencia de “una estrategia de largo plazo” por parte del gobierno “para lograr que Uruguay tenga tasas de crecimiento que, por lo menos, lleguen al crecimiento potencial de la economía uruguaya”. Afirmó que el país “está atravesando ya casi una década de bajo crecimiento” y las autoridades del MEF no han enseñado, “ni en esta oportunidad ni en ninguno de los años anteriores”, una estrategia de desarrollo de largo plazo para generar mayores niveles de crecimiento.

Consultado sobre el déficit fiscal, que según las proyecciones del MEF se ubicó al cierre del año pasado 0,6% por debajo del nivel que tenía en 2019, Ferreri advirtió que para los próximos meses “está prevista una baja de impuestos y una suba de gastos, justamente en un año en el que tenemos que concurrir a las elecciones”. Asimismo, señaló que “el crecimiento de la deuda neta en nueve puntos de PIB es preocupante” y sostuvo que también “se omitió incorporar el conjunto de gastos que se están realizando por fuera del perímetro fiscal, mecanismo que se utilizó de manera intensiva”.

Por su parte, Martín Vallcorba, economista y exasesor del MEF durante los gobiernos del FA, opinó que las variables macroeconómicas que eligió mostrar Arbeleche “sustentan un relato que es relativamente autocomplaciente”. Al igual que Ferreri, señaló que no se mencionó “los problemas de atraso cambiario que se acumulan desde 2022”, algo que “ha determinado un encarecimiento muy importante de nuestra producción y que sin duda afectó en forma importante el desempeño económico durante 2023”.

Asimismo, Vallcorba dijo que existe “un intento de construir un relato” en torno a que “todo el aumento del gasto [que] se realizó durante el gobierno del FA se financió con aumento de impuestos”, lo cual “es falso”. “El aumento de impuestos fue puntualmente en 2017, en el marco de un programa de consolidación fiscal, en el que sí efectivamente existieron los impuestos, pero para la magnitud del aumento del gasto que se registró durante los 15 años del gobierno del FA es absolutamente marginal”, aseguró.

Acerca del efecto positivo que tuvo la rebaja impositiva del IRPF y el IASS en el poder de compra, tal como señaló Arbeleche, Vallcorba apuntó que sólo en 2022 “el Estado uruguayo gastó 100 millones de dólares menos en pasividades”, mientras que la reciente rebaja del IASS significó una reducción de 30 millones de dólares, concentrada en aquellos que cobran las jubilaciones más altas.

En cuanto al salario real, que Arbeleche situó 2% por encima del valor que tenía en 2019, desde el Instituto Cuesta Duarte (PIT-CNT) señalaron a la diaria que en el promedio anual –es decir, no en la comparación puntual entre meses– todavía está 0,2% por debajo, y mencionaron que “en las conferencias de la ministra sistemáticamente se ha hecho un manejo muy arbitrario de los datos”, ya que “en algunos casos se miran promedios y en otros casos se miran los datos punta a punta, según sea más conveniente”. Por ejemplo, con respecto al dato de los 37.000 puestos de trabajo que se crearon en 2023, desde el Cuesta Duarte afirmaron que “eso es cierto”, y se trata del “dato promedio anual”.