Cabildo Abierto (CA) llegó a las firmas necesarias para habilitar la propuesta de plebiscito de reforma constitucional “contra la usura y por una deuda justa”. Enrique Montagno, coordinador de la campaña que llevó adelante el partido liderado por el senador Guido Manini Ríos, señaló a la diaria que por el momento cuentan con 278.000 firmas y superan las 276.600 que se necesitan constitucionalmente para que se habilite el mecanismo de democracia directa.
CA tenía como objetivo que el plebiscito se diera en la fecha de las elecciones nacionales, el 27 de octubre, pero al no llegar a las firmas el 27 de abril, que era la fecha límite para entregar las rúbricas, optaron por recolectarlas hasta el 24 de mayo para que el plebiscito se pueda dar en el balotaje.
En diálogo con la diaria, Montagno señaló que entre este lunes y martes llegarán “más paquetes” con firmas y que en las últimas dos semanas que quedan intentarán alcanzar las 305.000 firmas que se pusieron como objetivo por si hay algunas rúbricas que la Corte Electoral tenga que descartar. “Estamos a contrarreloj para alcanzar ese número”, indicó, y agregó que el próximo fin de semana será de “jornadas nacionales” de recolección de firmas.
“Es el último empuje para tratar de llegar a la cifra. En el interior están trabajando y están motivados”, expresó. En ese marco, dijo que por las lluvias e inundaciones en el norte y litoral del país “la gente bajó un poco los brazos”, pero apuntó que en otros puntos del país “está todo el mundo trabajando y motivado”.
En rueda de prensa, Manini Ríos dijo que tienen una “campaña bastante intensa” y que quieren tener ese “colchón” previendo los descartes que seguramente habrá. “Estamos preocupados por los altos índices de descartes que vemos que se están dando en otro plebiscito [el de la seguridad social] que se está promoviendo, por lo tanto tenemos que tener un colchón fuerte y estamos trabajando para antes del 24 de mayo tener ese colchón que nos asegure que va a haber plebiscito”, afirmó.
De acuerdo a Montagno, la gente “dejó para el último momento” la firma. El coordinador recordó que hace un año tienen la propuesta sobre la mesa pero que a la espera de recibir apoyos de otros partidos políticos se postergó la juntada de rúbricas. “En junio va a hacer un año que empezamos con el proyecto, organizar toda la estructura. Somos bien chiquitos y tenemos poca experiencia”, señaló.
Hasta el momento, la evaluación es positiva. Montagno indicó que hay una “gran satisfacción” por haber logrado el objetivo: “Fue solos, nadie nos acompañó. Sabemos que una campaña de esta naturaleza tiene un costo muy grande. Los recursos financieros nuestros son muy chiquitos, tuvimos que dejarlo para la última etapa”.
Dijo que “capaz” que si hubiera habido “un poco más de información” y “no se hubiera esperado fundamentalmente ese tiempo” de espera se podría “haber salido tres meses antes” con la juntada. “El balance es realmente positivo. Se está haciendo un esfuerzo muy grande y la gente está motivada”, celebró.
Por su parte, el senador cabildante Guillermo Domenech indicó a la diaria que les gustaría “mucho” que fuera la población la que en el ejercicio de un mecanismo de democracia directa pudiera pronunciarse “sobre un problema que sabemos que tiene trascendencia social a pesar de lo poco publicitado que ha estado esta solución”. Asimismo, remarcó que la propia campaña electoral les va a dar la oportunidad de “hablar mucho” sobre el tema y “de que la gente se informe y vea si aprueba la solución que proponemos o no”.
Al igual que Montagno, coincidió en que “fue muy a la uruguaya porque realmente tomó muchísimo calor en el último trayecto”. “Hubo una avalancha impresionante de firmas que hasta nos desbordó la capacidad nuestra de recibirlas. Además de recibirlas, les hacemos un chequeo primario a efecto de tener certeza de que las firmas tienen seriedad. Realmente nos generó la expectativa de que debía haber merecido otra publicidad” la propuesta, indicó, y afirmó que el gran problema que se tuvo fue que “la gente ignoraba la propuesta que se estaba intentando plebiscitar”. Asimismo, dijo que al haber otras propuestas que se pondrán a votación en octubre, como los allanamientos nocturnos y los cambios que promueve el PIT-CNT para la seguridad social, “contribuyó a la confusión”.
En tanto, el diputado de CA Martín Sodano indicó que “cuantas más firmas podamos presentar, por lógica, mejor es”. El legislador dijo a la diaria que esperan tener un “gran promedio” de firmas válidas, a diferencia del PIT-CNT, puesto que según informó este lunes El País un 20% de las firmas que se recolectaron no fueron aprobadas por la Corte Electoral.
“Nosotros podemos confiar un poco más en las firmas que conseguimos. No creo que tengamos tanto porcentaje de error, porque el recurso humano que tuvimos para la recolección de firmas es muy acotado, y al ser muy acotado también es un trabajo más personal, mano a mano, entre los que estamos al frente de esto, con las personas que firman”, manifestó.
A modo de balance, Sodano sostuvo que el primer problema que tuvieron fue el “desconocimiento” de la población respecto al plebiscito que promueven. “El desconocimiento de la gente a lo que estábamos promoviendo era muy grande, muy importante, en base a que no teníamos la estructura de cómo comunicar lo que estábamos queriendo impulsar. Eso nos costó muchísimo: hacer que se ponga el tema en la opinión pública. Después, cada vez que la gente escuchó la causa y lo que decían los puntos, la gente se adhirió enseguida”, sostuvo.
La papeleta, que de validar las firmas se votaría el 24 de noviembre en un eventual balotaje, propone modificar el artículo 52 de la Constitución de la República, que prohíbe la usura, al establecer que la ley defina “el interés máximo permitido por todo concepto, incluido tasas de interés compensatorio y moratorio, comisiones, reajustes y cualquier otro gasto adicional”.
Asimismo, busca que no se pueda “delegar a ninguna autoridad la determinación del interés máximo”. Además, se agrega la posibilidad de que “todas las deudas contraídas antes del 18 de julio de 2023, ya sea en moneda nacional, en moneda extranjera o en unidades reajustables”, puedan “ser canceladas por el deudor mediante el pago del monto inicialmente convenido”.