El directorio de Antel acordó que ITC, una empresa subsidiaria del ente público, pase a estar al frente de la gestión del Antel Arena. A su vez, desde la institución prevén aumentar la inversión para el período –lo que incluye un nuevo data center centrado en inteligencia artificial– y aún analiza la posibilidad de presentarse a la licitación por los derechos de televisación del fútbol uruguayo, entre otras novedades relevantes que marcan la coyuntura de la estatal.
Laura Raffo, directora de Antel en representación del Partido Nacional (PN), visitó la diaria Radio y reconstruyó el cambio de gestión en el Antel Arena. Dijo que “el tema se empezó a analizar en el período pasado”, ya que “bajo el gobierno de Luis Lacalle Pou vencía el contrato del operador, que fue contratado en 2018 de manera directa y observado por el Tribunal de Cuentas”, al carecer de un proceso de licitación.
De esta manera, ante el vencimiento inminente, el gobierno anterior definió elaborar “un grupo de trabajo que genere un pliego de licitación para cumplir con la norma”, y que también fue el encargado de “renegociar los plazos y costos con AEG Facilities”. Así, acordó “alargar el plazo de gestión” de la empresa privada y “en ese período ir elaborando el pliego de condiciones para un llamado a licitación”.
“Ese pliego se elaboró y estaba listo a finales de 2024. Fueron elegidas las nuevas autoridades, y el anterior gobierno lo dejó para que las nuevas autoridades puedan abrir ese proceso, pero cuando asumen las nuevas autoridades del Frente Amplio (FA) empiezan a tratar este tema de forma diferente”, consignó. Raffo dijo que se incorporó “recién en mayo de este año” y “desde el primer momento recomendó el proceso competitivo”, pero “el oficialismo empezó a dar señales de que no quería hacer este proceso competitivo”, por lo que finalmente se entregó “la gestión del Antel Arena a una subsidiaria 100% propiedad de Antel, o sea, a Antel mismo”.
“No se hizo competencia, no se hizo proceso de licitación, no se buscó el mejor negocio para los uruguayos, y Antel toma todo el riesgo de la gestión con lo que eso implica, porque si da pérdidas se tendrá que cubrir con el dinero de todos nosotros”, resumió al respecto.
Según Raffo, lo que dice el presidente de Antel respecto a que “a partir de ahora, como el operador cobra unos 500.000 dólares al año, se ahorra ese dinero” equivale a si “tuvieras una empresa con un muy buen vendedor que cobra un buen sueldo y, para ahorrar, lo despedís”: “No gasto más en ese sueldo, pero tampoco tenés los beneficios de contar con ese vendedor”, como “los contactos internacionales, el know-how, capacitaciones para el personal y la oportunidad para que el arena funcione al máximo”, ejemplificó.
Respecto a ITC, la nueva empresa que asumiría la gestión, dijo que “trabaja muy bien, pero se dedica a la consultoría tecnológica”, algo que “no tiene nada que ver” con “gestionar un estadio, espectáculos deportivos y musicales o conseguir contactos en el mundo”. “Ponés el peso de la gestión en alguien que no sabe hacerlo y, además, aunque ahorraras ese dinero, el balance que nos presentaron en el directorio tiene pérdidas que cuadruplican el monto que supuestamente ahorrarías y pone en riesgo el dinero de los uruguayos”, afirmó la nacionalista.
En cuanto a los contenidos, dijo que “entiende” si el oficialismo busca que el Antel Arena ofrezca “espectáculos populares o que pueda acceder todo el mundo”, pero “se podría haber hecho un pliego de licitación en el que Antel se reserve 30 días para espectáculos que decida hacer el Estado” y se coloque “todo el riesgo en la gestión del tercero”. “No es incompatible una cosa con la otra: acá ponés todos los riesgos en Antel y estás diciéndoles a los uruguayos que la empresa se va a poner a hacer un negocio que no conoce, que no sabe manejar y que dará pérdidas que se van a cubrir con tu dinero”, afirmó en la misma línea.
Antel “fuera de foco”
A raíz de lo anterior, la bancada del Partido Nacional convocará a la ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona, al Parlamento, quien también se reunió con la propia Raffo. La directora por la oposición explicó que “llevó un informe sobre el tema para los senadores de su partido” y los legisladores decidieron convocar a la titular del MIEM y al directorio de Antel para que “vengan a informar” y “opinar con los números arriba de la mesa”.
“Me parece que es lo más sano, y soy partidaria de democratizar la información”, definió, aunque reiteró que la decisión “pone en riesgo el bolsillo de los uruguayos”, y agregó que “saca del foco a Antel”: “Soy una obsesiva con que todo el mundo tenga buena conexión a celular y buen acceso a internet”, porque “hay una enorme diferencia entre las ciudades y poblados que acceden a internet bien y los que no”. “Me gustaría que Antel se enfocara precisamente en eso, que lo hace muy bien: conectar a los uruguayos”, advirtió.
Por otro lado, Raffo calificó que avanzar en la industria de los data centers “es fundamental”, porque “la mayoría de los ingresos de Antel provienen de los servicios móviles y fibra, un 9% de telefonía fija y un 2% de los servicios de data center”, una “industria creciente en el mundo entero”. “Si Uruguay logra convertirse en un hub de instalación de data centers, traerá muchos beneficios a la economía, porque no solamente van a venderse servicios a empresas locales e internacionales, sino que también se puede generar una industria manufacturera alrededor”, comentó.
A su vez, también coincidió con la idea de fomentar los contenidos audiovisuales como “una forma de mantener a los clientes y capturar nuevos”. Señaló los acuerdos que Antel concretó con Netflix y Disney, “un elemento diferenciador” que “se coloca en la balanza, además del buen servicio que brinda Antel”, en un mercado “muy competitivo”.
Finalmente, vinculado a la posibilidad de que Antel compita en la licitación de la Asociación Uruguaya de Fútbol por los derechos comerciales del fútbol uruguayo –negocio que asciende a un valor de 34 millones de dólares por cuatro años–, Raffo dijo que “hasta ahora no estaban los montos, por lo que no se había hecho una evaluación”, pero “sería positivo hacer un análisis concreto, económico y financiero para ver si conviene”.