La foto de los militares entrando al Palacio Legislativo el 27 de junio de 1973 es una imagen que “acompañó todo el día” a la vicepresidenta de la República, Carolina Cosse, según dijo. “Está la foto, armados hasta los dientes, entrando, y, contrarrestando esa, tengo la imagen de hace dos días, en ese mismo hall inmenso, maravilloso, lleno de niños con la túnica y la moña de la escuela pública de Uruguay. No pudieron, cuánto costó, pero no pudieron”, subrayó.

Con ese preámbulo, a 52 años del golpe de Estado y de la Huelga General, y en el marco de la mesa redonda “Nuevo escenario internacional y perspectivas para la región”, organizada por la Fundación Liber Seregni y el Frente Amplio (FA), la vicepresidenta consideró “oportuno” reflexionar sobre “los enemigos de la democracia” y el “ataque” a esta que “se expresa de distintas maneras”.

Este viernes, en La Huella de Seregni, se llevó adelante este espacio que contó con la participación del presidente del FA, Fernando Pereira, el canciller de la República, Mario Lubetkin, el exsenador Enrique Rubio, la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales de México, Alicia Bárcenas, el ex jefe de gabinete de la Presidencia de Brasil, el excanciller argentino Jorge Taiana, y el exministro de Economía y Comercio de Chile Carlos Ominami, quien moderó la mesa.

En su intervención Cosse apuntó que “naturalizar el bullying en la política va en contra de la democracia”. “Cuando naturalizamos que las cosas tienen que resolverse a los gritos”, la democracia “va perdiendo”, apuntó. “Cuando uno ve que en distintos aspectos de la vida va ganando el avasallamiento, es duro seguir peleando, pero la vida es dura, entonces qué importante es la ilusión”.

El presidente del FA habló sobre lo regional y afirmó que un país como Uruguay “puede generarle a la discusión pública sobre los temas de actualidad mundial un pienso profundo”. “No se puede mirar con indiferencia lo que está pasando en América Latina, no podemos mirar con indiferencia cómo las ultraderechas avanzan y se consolidan como en Argentina”. Por otro lado, desde lo nacional, se refirió a la necesidad de “la confluencia de las organizaciones sociales en el proceso de cambios que el gobierno uruguayo inicie”.

Para Lubetkin, la política exterior debe contribuir al “desarrollo integral” del país y ayudar a la región

En línea con Pereira, Lubetkin dijo que “cada uno de los temas internacionales” que Uruguay” sigue “tienen y tendrán relevancia en nuestra política local”. “Esta es la contextualización y el espíritu con el que este gobierno está pensando en las relaciones externas del país”, destacó.

De esa forma, remarcó que desde el gobierno se harán “todos los esfuerzos para que sea una política exterior de Estado construida a través del diálogo democrático inclusivo y participativo de nuestra sociedad, que contribuya finalmente al desarrollo integral de nuestro país y contribuya de esta manera y ayude a la región”.

“El resultado final de nuestra política exterior debe ser ayudar a nuestro país, debe determinar el crecimiento de la fuente de trabajo, de las inversiones, debe determinar más y mejor cultura para nuestro país, mejor ambiente”, subrayó.

El canciller resaltó que “vivimos en un contexto internacional muy complejo, muy cambiante, con un fuerte aumento de las tensiones geopolíticas y de la competitividad internacional”. “La diplomacia transaccional, la ley del más fuerte, las zonas de influencia, los equilibrios de poder, la realpolitik, conceptos que por tantas décadas y siglos definieron el concierto internacional han sido despolvoreadas y vuelven a ganar un protagonismo bien fuerte”, sostuvo.

Por último, se refirió a la confirmación de Italia de apoyar la “finalización” del acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, y dijo que este no se limitará a un acuerdo comercial “para mejorar los mercados”, sino que desde el gobierno se entiende “en clave geopolítica”. “Lo entendemos pensando en la creación de una nueva comunidad de 600 millones de personas que compartan una esencia valorativa y cultural, así como en lo político y social”, indicó.