La Cámara de Diputados aprobó ayer un llamado a sala en régimen de interpelación al ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, “a los efectos de que brinde explicaciones sobre las acciones emprendidas por el Poder Ejecutivo, a través de su secretaría de Estado, en relación con la suspensión del proyecto Neptuno”, así como también sobre “el anuncio por parte del Poder Ejecutivo de las futuras obras a realizarse” en sustitución de la iniciativa, que pretendía construir una planta potabilizadora en la zona de Arazatí (San José), con una toma de agua en el Río de la Plata, para abastecer al área metropolitana.

La moción de la interpelación fue aprobada únicamente con los votos de la oposición; los legisladores del Frente Amplio votaron en contra. Tal como estaba previsto, el miembro interpelante será el diputado del Partido Colorado (PC) Walter Cervini. También concurrirán las autoridades de OSE.

Está previsto que la interpelación tenga lugar el próximo martes 19 de agosto. Será la segunda en lo que va de este período de gobierno, luego de que ayer la oposición interpelara al titular del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, Alfredo Fratti, por la compra de la estancia María Dolores por parte del Instituto Nacional de Colonización.

En el plenario de la Cámara de Diputados, Cervini afirmó el miércoles que la suspensión del proyecto Neptuno, cuyo contrato fue firmado en el marco de la transición del gobierno encabezado por Luis Lacalle Pou, “genera una cantidad de dudas y de incertidumbres”.

El diputado del PC recordó que la semana pasada Ortuño compareció durante ocho horas ante la Comisión de Ambiente de la Cámara de Diputados; sin embargo, “muchos de los cuestionamientos que hicimos, a nuestro criterio, no tuvieron respuesta y nos generaron más dudas que certezas”, afirmó Cervini.

“Por eso hemos decidido presentar esta moción de interpelación al ministro Ortuño, para tenerlo en esta sala y que todos los diputados tengan la posibilidad de hacer las preguntas sobre las dudas que tenemos de este proyecto suspendido y de la planificación del agua potable a futuro, que tanto nos preocupa para el país”, manifestó Cervini.

El diputado del Partido Nacional Juan Martín Rodríguez sostuvo que durante la comparecencia de Ortuño ante la Comisión de Ambiente “muchas de las preguntas formuladas quedaron sin respuesta y muchas otras nos generaron nuevas dudas”. Afirmó que el objeto de la interpelación “es de central importancia para el área metropolitana, donde 1.800.000 habitantes reciben el suministro de agua”.

Por su parte, el diputado de Identidad Soberana, Gustavo Salle, quien también acompañó la convocatoria al ministro de Ambiente, sostuvo que en la sesión de la Comisión de Ambiente “las explicaciones dadas con respecto a la situación fundamentalmente de carácter jurídico entre el contrato Arazatí-Neptuno y la nueva contratación” para las obras a realizarse en Florida resultaron “insuficientes”. Las obras serán realizadas por Aguas de Montevideo, el mismo consorcio privado que tenía a su cargo la construcción del proyecto Neptuno.

La decisión del actual gobierno de cancelar la iniciativa de la anterior administración y disponer en su lugar la construcción de una nueva planta potabilizadora en la cuenca del río Santa Lucía fue cuestionada por el expresidente Luis Lacalle Pou, quien calificó la resolución como “netamente política y técnicamente desacertada”.