El Centro Nacional de Quemados (Cenaque) del Hospital de Clínicas cerró el año inaugurando una nueva área de cuidados intermedios. El ministro de Salud Pública Jorge Basso hizo ayer una recorrida por las nuevas instalaciones del centro que es referencia nacional. En total son 11 camas nuevas, que costaron 11.000 dólares cada una; cuentan con un diseño especial que permite un mejor trato de la persona quemada, incluso se puede pesar al paciente ‒dato fundamental para medir la mejoría‒ sin tener que trasladarlo; asimismo, dejan que los médicos y enfermeros trabajen con el quemado sin comprometer su salud con malas posiciones.

Basso destacó, en declaraciones a la prensa, que estas camas se suman a una inversión en equipamientos que asciende a seis millones de pesos. Estas remodelaciones complementan la reforma del área de CTI que comenzó en 2017. El cambio en las instalaciones es fundamental ya que el quemado tiene una larga recuperación en el hospital: el promedio de internación es de siete días para el paciente de CTI, de 11 días para el paciente de cuidados intermedios, y varias semanas cuando ya está estable. Según datos de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), en los últimos 10 años egresaron 1.598 pacientes con una mortalidad en ese período de 17,5%; 50% provino de prestadores públicos y la otra mitad de mutualistas y seguros privados.

La directora del hospital Graciela Ubach destacó que esta remodelación es parte de un programa de refuncionalización que implica la mejora de la plata física con inversiones “muy importantes”. Comentó que además del Cenaque hay cambios en las áreas de hospitalización en los pisos 7, 8, 9, 10 y 11, para que se conviertan en salas con más confort y privacidad. Asimismo, se recuperaron las escaleras, que son un símbolo de la arquitectura del hospital, pero se agregaron medidas de seguridad para evitar que la gente se suicide, según dijo Ubach. Además, señaló que está avanzando un proyecto para la consulta externa del hospital, que atiende 150.000 consultas al año.

Ayer también se reinauguró el área de Microbiologia Automatizada del Laboratorio de Patología Clínica del hospital. La reforma se hizo con el objetivo de readecuar la planta física para el funcionamiento que requiere la tecnología de microbiología automatizada. Con estos cambios el hospital universitario se convirtió en el primer centro en adquirir esta tecnología. Este tipo de herramientas permitirá la mejora en la identificación de bacterias, hongos y parásitos asociados al diagnóstico, ya que posibilitan obtener resultados en un menor tiempo que hasta ahora.