El tiempo que lleva trasladar a un paciente desde su casa a un hospital o desde una policlínica a un CTI puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte. En Uruguay las distancias no son muy grandes, pero aun así el traslado es un tema complicado, sobre todo porque el servicio de emergencia de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) no da abasto para cubrir todo el territorio. Por esto, ASSE se propuso como meta para 2019 concretar un Sistema Nacional de Traslado en el que la actividad pública se complemente con empresas privadas para garantizar un transporte seguro y de calidad a un precio adecuado.

El presidente de ASSE, Marcos Carámbula, declaró ayer a Radio Sarandí que la idea es abrir un llamado entre marzo y abril a prestadores privados que puedan cubrir las zonas que son una debilidad para el sistema público: “Vamos a hacer un llamado público a nivel nacional, de tal manera que cuando tengamos una dificultad de traslado, como por ejemplo tenemos en la ruta 7, se complemente”, sostuvo, y comentó que el objetivo es saber exactamente “quiénes se presentan, qué precios van a cobrar y la calidad de cuidado que tiene el traslado”. El jerarca dijo que de la forma en que está funcionando hoy “un médico que está al frente de un hospital o policlínico grande y tiene que hacer un traslado sin tener en ese momento una ambulancia pública debe recurrir al sector privado, y por ahí la calidad no es siempre la misma y el precio no es lo que debemos pagar”.

Días atrás Carámbula comentó en diálogo con la prensa que el llamado público nacional es “fundamental” porque permitirá “dilucidar los temas de conflictos de interés”, ya que es obligación de ASSE “marcar una normativa que genere rigurosidad en ese sentido”; además, dijo que el llamado asegurará “la calidad de los traslados y un acuerdo de precios razonables en todo el país; ese es un gran objetivo”. El presidente de ASSE resumió: “El sistema nacional de traslado funcionará de tal manera que el paciente que esté en un lugar distante y el médico y equipo que lo estén atendiendo sepan que tienen el respaldo para hacer un traslado en tiempo y forma”.

La principal estructura del sistema nacional de traslado será pública, por eso va a ser fundamental la centralización de las llamadas de emergencia de la línea 105 del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME, ASSE). Carámbula destacó que con el aumento presupuestal que otorgó la última Rendición de Cuentas se podrá implementar una central de llamados compuesta por un equipo médico que va a priorizar los pedidos y “resolver de acuerdo a los datos a dónde debe ser trasladado ese paciente”; para eso señaló que están licitando el software adecuado para procesar esa información. Además, con mayor presupuesto se buscará “fortalecer su cobertura actual en el área metropolitana fundamentalmente”.

El otro pilar del sistema serán los diez centros de referencia del país. El objetivo primario es, por lo menos, lograr un traslado rápido a alguno de estos centros: “Tenemos la obsesión de que el traslado no puede demorar más de una hora a un centro de referencia, en cualquier punto de país”, afirmó Carámbula, y en esta línea subrayó que se hizo un acuerdo con la Dirección Nacional de Ordenamiento Territorial para evaluar en conjunto las posibilidades que brindan las rutas nacionales, con el objetivo de que “cualquier ciudadano del país, en una hora, cuente con un traslado adecuado a un CTI si lo precisa”.