Entre 2012 y 2017 murieron 396 personas por ahogamiento en nuestro país, según datos del Ministerio de Salud Pública. Esta problemática es la primera causa de muerte por lesiones no intencionales en niños de uno a cuatro años y entre los que tienen entre diez y 14, y la segunda causa de muerte entre niños de cinco a nueve años. El riesgo que significa para la infancia fue lo que motivó, en diciembre de 2018, a los diputados Cristina Lustemberg (Frente Amplio, FA) y Pablo Abdala (Partido Nacional, PN) a presentar un proyecto de ley que propuso crear un programa nacional de prevención de ahogamiento infantil, con foco en niños de cero a seis años. Además, proponía que las piscinas públicas o privadas, de uso particular o colectivo, contaran con cercas de seguridad y alarmas de inmersión.

El texto comenzó a ser trabajado en abril en la Comisión de Salud de Diputados, que en junio recibió al subsecretario de Salud Pública, Jorge Quian, y a representantes de la Mesa Interinstitucional de Seguridad Acuática (MISA, integrada por el Ministerio de Salud Pública –MSP–, la Dirección de Deporte de la Intendencia de Montevideo, la Asociación Nacional de Guardavidas, el Servicio de Guardavidas de Montevideo y la Asociación de Salvamentos Marítimos y Fluviales). Allí, Quian sugirió que se incluyera a los niños de hasta 14 años, y remarcó que “la mayoría de los ahogamientos no ocurren en piscinas sino en playas, ríos, lagunas o lugares en los que, en general, está prohibido bañarse o hacer actividades acuáticas”. Según los datos que presentó Quian, en 2018 hubo 168 eventos relacionados con situaciones de riesgo en el agua, de los que 62% ocurrió en playas, ríos o arroyos, y 4,5% en piscinas.

31 niños y adolescentes murieron en 2018 por esta causa. El jerarca añadió que los eventos que ameritan rescate se clasifican en seis grados, de los que el sexto es el fallecimiento, pero en los que el grado cinco deja importantes secuelas neurológicas.

A partir de las sugerencias la MISA, Nibia Reisch, diputada colorada y presidenta de la comisión, elaboró otro proyecto que presentó junto a diputados del FA y del PN. Es breve, al igual que lo era el de Lustemberg y Abdala, pero es diferente. Declara al ahogamiento como un problema de salud pública y encomienda al MSP la elaboración del Plan Nacional de Seguridad Acuática (que convocará a la MISA), que promoverá programas de educación y capacitación en acciones de seguridad acuática. No especifica nada de las piscinas. Lustemberg y Abdala concurrieron a la comisión y valoraron positivamente el nuevo proyecto.

Reisch informó a la diaria que la comisión ya firmó el informe sobre este proyecto, lo votó y lo pasó al plenario de Diputados, que esta semana podrá votarlo. Sin embargo, dijo que no hay certeza de que el Senado pueda votarlo antes del receso.