En el informe de análisis de la situación de la epidemia por coronavirus en Uruguay del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) del 18 de enero, los especialistas del área de datos señalan que “los niveles de testeo reciente no aseguran la misma confiabilidad [que en otras etapas de la epidemia] para las incidencias actuales” y que “en un escenario actual de 800 casos nuevos diarios, habría que realizar 20.000 test diarios” para tener la tasa de positividad recomendada del 4%, que al momento de la publicación del informe se encontraba en un promedio semanal en los resultados de los test del 11%. Los integrantes del GACH apuntan que se puede “subsanar a futuro el déficit mediante la incorporación de nuevas tecnologías” como test antigénicos y test LAMP.

El número de test realizados en las últimas semanas está muy lejos de la cantidad recomendada por el GACH. Entre el lunes 18 de enero y el domingo 24, no se superó los ocho mil test -a excepción del viernes que se realizaron 9.533 análisis-. El promedio se ubicó en 6.915 análisis. La disminución de test se viene dando desde la última semana de diciembre. Durante su visita a la Comisión de Salud Pública, el 5 de enero, el titular del Ministerio de Salud Pública, Daniel Salinas, aseguró que “a todos nos sorprendió que bajara la cantidad de test en estos días, pero algunas explicaciones hay”. Salinas atribuyó la situación en parte a los feriados del 25 de diciembre y 1° de enero que pueden haber ocasionado un descenso en el nivel de test. Otro motivo que planteó fue la restricción del ingreso de personas del exterior, que debían de hacerse el hisopado al séptimo día de estar en Uruguay si querían levantar la cuarentena (de lo contrario, tenían que hacer 14 días de cuarentena). También mencionó la reprogramación de cirugías de coordinación (no urgentes ni oncológicas) que se estableció el 9 de diciembre para instituciones de salud de Montevideo, Canelones y Chuy, algo que ya regía en ese momento en Rivera.

Una fuente del MSP informó a la diaria que desde la cartera no consideran que se estén realizando pocos test. A los argumentos planteados por Salinas, la fuente añadió la cantidad de test que se solicitaba a partir de casos positivos en centros educativos. “En octubre, noviembre, diciembre se hacían una cantidad de test que en estos momentos no se están haciendo. Por ejemplo, cuando había un caso en un centro educativo, se testeaba a toda la clase y si [el caso positivo] era un docente se testeaba a todas las clases con las que había tenido contacto” y las familias de los estudiantes y trabajadores de la educación. Esas situaciones con el fin de los cursos, ya no están presentes. La fuente descartó que uno de los motivos de disminución de test pueda ser el traslado de personas de Montevideo al interior por las vacaciones porque cualquier persona puede acceder al hisopado en el departamento en que se encuentre.

“El sistema cumple con los requisitos necesarios y tiene capacidad suficiente. Se ha demostrado que se pueden hacer más de 10.000 test fácilmente”, sostuvo la fuente del MSP. En ese sentido, manifestó que la cantidad de análisis que se están haciendo corresponde a la demanda, descartó que haya demoras en la realización de los hisopados y en la entrega de resultados, y enfatizó en que el sistema está lejos de estar saturado. De todas formas, reconoció que pueden haberse presentado “casos aislados” de demoras en “algún prestador puntual por ir a hisopar a domicilio o por coordinación”, pero no es una circunstancia “generalizada”, dijo. “El test se hace, puede ser que demore un día más o un día menos, pero no hay una saturación del sistema. Los laboratorios tienen capacidad”, expresó. Mencionó, además, que el MSP hace inspecciones en los prestadores de salud y laboratorios “para ver el cumplimiento” y que no ha constatado demoras.

Prestadores y médicos

El presidente de la Federación de Prestadores Médicos del Interior, Carlos Cardoso, sostuvo en diálogo con la diaria que “se están haciendo todos [los análisis] que se solicitan” y afirmó que “los laboratorios institucionales están funcionando a pleno”. Cardoso recordó que para abastecer la demanda ya se están aplicando en algunos departamentos los test antigénicos. Estos análisis se realizan en personas sintomáticas en los primeros cinco días en que se manifiesten síntomas de coronavirus y se obtiene un resultado más rápido. Cardoso argumentó que la razón detrás de la baja de números de test “aparenta ser solo la demanda” y que eso puede explicarse porque hay “menos consultas, menos cirugías coordinadas, actividades en la sociedad que requieren hisopados, fronteras cerradas”. El presidente de Fepremi había expresado en entrevista con Telemundo el 8 de enero que se había registrado una caída en la cantidad de consultas “tanto sea para hacerse el test como por otros motivos”. En el área metropolitana la caída alcanzó en “números generales” un 30%, dijo Cardoso. “Es el área que es más notoria porque es donde está concentrado el incremento de casos, pero normalmente en general todo este período del mes de enero y las fiestas, hay una disminución de consultas o de cirugías de causas que sean coordinadas. Eso sucede todos los años”, expresó.

La infectóloga e intensivista Daniela Paciel, docente honoraria de la Cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República (Udelar), dijo a la diaria que en las dos instituciones privadas en las que trabaja la respuesta “es rapidísima”; detalló que una de esas instituciones dispone de “la posibilidad de hacer hispados y tienen los resultados en 24 horas” de pacientes internados y consultas en domicilio, y que la segunda realiza los análisis a través de un laboratorio privado y los resultados están en “12 y 24 horas”. Sobre la baja de demanda de test, sostuvo que hay dos elementos que hay que tener en cuenta. Por un lado, dijo que hay personas que confunden los síntomas con alergia o que no consultan “porque no quieren que los cuarentenen”, y por otro, señaló que “hay personas que llaman para consultar porque tienen síntomas mínimos y hay médicos que no están pidiendo los hisopados”. Esto, para la infectóloga, sucede “en general” con los médicos del sistema de salud y comentó que en la recomendación del hisopado influye la atención por telemedicina, que limita lo que los médicos pueden “percibir del paciente”. La infectóloga manifestó que un tema que “preocupa muchísimo” es que en “algunos pacientes” que “el resultado del análisis PCR es negativo” pero que cuando “la sospecha clínica es alta, el test debería repetirse”, cosa que no ocurre, según refieren algunos pacientes.

Jacqueline Ponzo, médica de familia y comunidad que se desempeña en el primer nivel de atención y magíster en Epidemiología, dijo a la diaria que la situación de demoras “tan importantes” que había en la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) en la realización de test y la entrega de los resultados se “ha reducido” en relación a la situación “complicada” que se dio en las fiestas, cuando “hubo muchos más test de los que se están haciendo ahora”. “Esas demoras que había para llegar a hisopar y entregar los resultados, ha mejorado”, manifestó.

Sin embargo, sostuvo que hay otro problema en relación de los hisopados que “se está manifestando ahora” que se relacionan con “la dificultad de implementación en el primer nivel de atención”. “Los equipos de primer nivel de atención no tenemos toda la autonomía que necesitamos, cada prestador dispone según su criterio cómo hacer los hisopados e incluso tienen un sistema centralizado para decidir si autorizan o no el hisopado a través de la dirección técnica o de alguna persona designada para esa función y eso muchas veces entra en contradicción con el criterio que plantea el médico de primer nivel”, aseveró Ponzo. Planteó que esto genera “un problema” porque la “situación de las personas, de las familias y de los contactos es bastante más compleja de lo que puede reflejar un protocolo”. Según la experta, al momento de definir si testear o no a un contacto de una persona sintomática, “quien está en mejor situación para resolver y aplicar el protocolo a cada situación es el equipo de salud en contacto con las personas”. Asimismo, planteó que la toma de decisiones con un mecanismo centralizado genera demoras y “a veces no se autorizan hisopados que deberían realizarse”.

Otro problema que señaló Ponzo fue “la distancia que hay entre las personas que tienen que hisoparse y el laboratorio”, lo que “genera situaciones que no están del todo bien resueltas”. Por ejemplo, dijo que una persona que tiene indicación de hacerse un hisopado no puede entrar en contacto con otras personas, que si tiene auto y hay un puesto de autotest cerca “puede ir y hacerse el test”, pero que si no es así “debe permanecer en domicilio hasta que vayan a hacerle el test en su casa”. “Esas situaciones ideales no siempre se están dando, se están generando dificultades en el acceso al hisopado también por ese motivo” dijo, y señaló que todo eso “va entorpeciendo” la identificación de los brotes y el seguimiento de los contactos. Esta situación podría subsanarse, según la experta, dotando de recursos para el testeo a los equipos de salud locales. Un paso, en ese sentido, se dio este martes cuando el MSP le donó 2.300 test antigénicos a la Intendencia de Montevideo para que sus policlínicas hagan testeos.

“Estas situaciones están siendo gestionadas en forma muy diversa por los prestadores del Sistema Nacional Integrado de Salud y sería importante contar con criterios que garanticen el trabajo adecuado en el primer nivel de atención, en el ámbito comunitario, para el testeo y que las instituciones más allá de la autonomía que tengan para organizar sus recursos deban garantizar las condiciones de diagnóstico y de trabajo con la seguridad y la efectividad que se precisa en este momento”, expresó Ponzo.

Referentes de laboratorios

Fuentes del Institut Pasteur de Montevideo señalaron a la diaria que el laboratorio está en buen funcionamiento y “nada saturado”, porque se están recibiendo “más o menos las mismas cantidades [de muestras]” que en otras etapas de la pandemia. Andrés Abin, director científico de ATGen sostuvo que la empresa tiene “capacidad ociosa tanto en el laboratorio como en los autotest”. Abin manifestó que no tiene una explicación de por qué se hacen “menos test de los necesarios”.“No sé si es un nivel bajo de testeo realmente. El parámetro que estaría indicando que es bajo es la alta positividad y, un poco más indirecto, el alto porcentaje de casos sin identificar el hilo epidemiológico”, expresó. Sobre la disponibilidad de los resultados, planteó que demoran en el entorno de las 24 horas.

En el norte del país la situación es distinta. Rodney Colina, director del Laboratorio de Virología Molecular de la sede de Salto del Centro Universitario Regional Norte de la Udelar, sostuvo que están “totalmente saturados, estamos en el tope de la capacidad de estudio, al límite de lo que podés hacer”. El laboratorio realiza 100 análisis por día de muestras de usuarios de ASSE de Salto, Paysandú, Artigas y Fray Bentos (Río Negro). Cuando se supera la capacidad del laboratorio, el análisis de las muestras se acumula para el día siguiente y así sucesivamente. Colina expresó que en el contexto del aumento de casos la demanda “está siendo bastante alta”. De todas formas, planteó que el laboratorio cumple con los tiempos de entrega de las muestra: “en 98% se entregan en 24 horas y el resto en 36 horas. No demoramos más de 48 horas”. “Estamos en el límite, pero estamos respondiendo en tiempo y forma”, dijo Colina.

En el caso del laboratorio de diagnóstico de covid-19 de la Udelar en Tacuarembó, Colina expresó que se analizan entre 50 y 60 muestras por día y están “en constante saturación”, afirmó; acotó que ese laboratorio está en transición porque el hospital de Tacuarembó va a empezar a hacer el estudio de las muestras a través de un sistema robotizado que incorporó ASSE, lo que va a incrementar la capacidad de testeo en el lugar. El laboratorio de la Udelar en Rocha, tiene una capacidad para procesar 60 o 70 muestras por día y está “totalmente saturado”, sostuvo el académico.