Desde que se dispararon los contagios de covid-19 en enero, varias personas fallecieron en sus casas sin haber recibido asistencia, por esto la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), desde el 21 de abril, prioriza la atención de personas con coronavirus a través de llamadas telefónicas, por telemedicina y visitas domiciliarias, en un intento de dar respuesta a quienes están cursando la enfermedad en sus hogares.
Pero ¿qué debe hacer una persona cuando tiene un diagnóstico positivo y ha desarrollado síntomas, pero no sabe reconocer la gravedad del cuadro?
Arturo Briva, médico intensivista e integrante del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), dijo a la diaria que “es difícil decir que con algún síntoma sí o sí se debe consultar, porque la infección se va instalando con síntomas que en un primer momento parecen los de una gripe común, y después empieza el deterioro. Lo importante es que los pacientes estén identificados ya desde etapas tempranas; eso no quiere decir que tengan que ir a una emergencia, pero de alguna manera el prestador tiene que tener algún sistema de seguimiento”, afirmó.
Sobre el uso de saturómetros, dijo que pueden ayudar a detectar si bajan los niveles de oxígeno en sangre. Los niveles normales son entre 95% y 100%, aunque “pacientes más ancianos, con alguna patología previa o pacientes con enfermedades respiratorias crónicas pueden tener de manera habitual niveles más bajos”. Pero en un paciente sin este tipo de condición, es un síntoma de alerta si satura cerca o por debajo de 90%, y tiene que consultar.
Un saturómetro en las farmacias del país cuesta entre 2.500 y 3.000 pesos. En una de las plataformas de compra en línea más usadas hay opciones que rondan los 1.300 pesos.
Sobre las vacunas, Briva dijo que, si bien el efecto es bueno, eso no implica que no haya que mantener las medidas de protección recomendadas, como el uso de tapabocas, el lavado de manos, el distanciamiento social y cuidar los círculos en los que nos movemos.
“No estamos siendo efectivos, nunca bajamos de 2.000 casos positivos por día. Hay que seguir insistiendo con las medidas de protección porque, por el motivo que sea, no estamos cortando la circulación comunitaria del virus”, aseguró.
Sobre la cantidad de ingresos a CTI, dijo que en estos días que pasaron de mayo el promedio ha estado entre 40 y 50, la misma tendencia que en abril. Ayer se registraron 2.701 casos nuevos de covid-19 y 60 fallecimientos, y había 537 personas en cuidados intensivos. “Las camas que quedan libres son proporcionalmente cada vez más por los fallecidos que por las altas. Cada vez que a nivel comunitario aumentan los contagios, lo que esperamos para los próximos 15 días es lo mismo o peor”, aseguró Briva.
El especialista agregó que “el CTI está al final de una cola de eventos que ocurren desde la comunidad, y hasta que no bajen los contagios no podemos esperar que ocurra nada diferente con los pacientes del CTI”. Para evitar que las personas lleguen a esa instancia, dijo que cuando ven que los síntomas empiezan o empeoran, deben comunicarse con el servicio de asistencia que tengan; “lo importante es que estén identificados”. Con relación a las personas que no viven en capitales departamentales, dijo que tienen una respuesta más frágil, pero de todas formas tienen que comunicarse con su prestador de salud y ver si este les ofrece algún servicio de seguimiento domiciliario.
Marcela Cuadrado, presidenta de la Sociedad Uruguaya de Medicina Familiar y Comunitaria, dijo a la diaria que en el caso de que la persona tenga un médico de familia, lo mejor es que se comunique con él o con el equipo tratante, ya que es una referencia de ayuda en caso de que el paciente con coronavirus empiece a tener síntomas más fuertes. De no tener ese profesional de referencia, la persona se tiene que comunicar con el prestador de salud y este debe brindarle un sistema de apoyo. Cuadrado comentó que muchas veces pueden detectar por teléfono cuando la persona está desmejorando, porque “no puede dejar de toser, dice que le falta el aire cuando va al baño o la familia directamente cuenta que no puede respirar”.