El vocero de la Asociación de Química y Farmacia del Uruguay (AQFU), Pablo Mujica, dijo a la diaria que le solicitaron este lunes al presidente de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Leonardo Cipriani, una reunión de carácter “urgente” porque la voluntad de la organización es que “el paciente tenga el medicamento que tenga que tener” para que “todos los tratamientos crónicos no se corten”.

Según dijo, la razón primaria es “la atención del paciente” y desde la asociación quieren “aportar soluciones creativas para ver cómo se puede remediar este problema: si por una nueva licitación o renegociación. Pero hay que sentarse a discutirlo”.

Las soluciones a plantear parten de las [declaraciones de Cipriani] (https://ladiaria.com.uy/salud/articulo/2022/4/cipriani-dijo-que-si-asse-no-puede-corregir-distribucion-de-medicamentos-se-va-a-privatizar/), vía Twitter y en conversación con Quién es quién, alegando que la distribución de medicamentos en ASSE tiene demoras de hasta 15 días y que, si en el próximo tiempo la situación continúa igual, está dispuesto a privatizar ese procedimiento.

Al respecto, Mujica sentenció: “Si vos no tenés medicamentos para distribuir, por más eficiente que sea el operador logístico, no tiene cosas para distribuir”. Según pudo estimar, ASSE estaría “20% por debajo de rubros de plata para comprar los medicamentos necesarios”.

El vocero puso sobre la mesa el proceso hasta llegar a las demoras y faltantes actuales: según dijo, en 2017 el Ministerio de Economía y Finanzas efectuó una licitación que, entre otras cosas, determinó el presupuesto de ASSE para cierta cantidad de medicamentos, por un tiempo determinado, que “normalmente se estima en un año o dos, y a veces puede haber extensiones de la licitación hasta un año o más, manteniendo los precios, siempre y cuando el comprador y el vendedor estén de acuerdo”. La compra era centralizada, “para aumentar el volumen de compra y, obviamente, tener un precio más barato por unidad”.

Mujica explicó que una vez finalizado el plazo licitatorio, hubo empresas farmacéuticas que no quisieron continuar con esa licitación, por ende, para “comprarle los productos a esa empresa tenés que hacer una compra directa”, y en ese caso, “comprás por menos cantidad y normalmente el precio de ese medicamento te sube. Entonces, con el mismo dinero, aun ajustado por el IPC [índice de precios del consumo], que no siempre se hizo, vas a comprar menos unidades”.

Por otro lado, Mujica comentó que durante 2021 se utilizó el fondo covid-19 y una “inyección de dinero extra, puntual y extrapresupuestal” en noviembre y diciembre, que ayudó a no dejar en cero el “stock de contingencia -o de reserva- de medicamentos”. Esa reserva se fue consumiendo, entre otras razones, porque “el presupuesto asignado es menor que lo que se precisa”, hasta llegar a hoy, que “están apareciendo faltas de medicamentos”.

A partir de los dichos de Cipriani, por otra parte, para Mujica se “prenden alarmas que de repente no necesariamente tengan que ser tantas”, porque entendió que hubo acusaciones de “irregularidades” en farmacias pero de forma “inespecífica”. De esta forma “generan mucho ruido y no dan oportunidad a quien le hayan encontrado la irregularidad”. Mujica puso el ejemplo de que, si en una farmacia encuentran “uno, dos o la mayoría” de los medicamentos vencidos, “tenés un problema de gestión. Pero si no hay una auditoría atrás, programa, que sea proactiva, seguís quedándote con el problema y no mejorás”.

En ese marco, aseguró que no tienen datos de que “haya sido una cosa masiva”. Entre los cuestionamientos que harán como grupo está, entonces, conocer “qué cantidades fueron, el origen de los medicamentos, porque todas estas cosas son trazables en el sistema informático de ASSE”, así como conocer qué químico estuvo “en el ojo de la tormenta, para ver cómo mejorar su gestión”.