“Para nosotros el debate sobre la eutanasia es filosófico, ético y sobre todo social”, expresó a la diaria Oscar Cluzet, consejero nacional y presidente del comité de bioética del Colegio Médico del Uruguay (CMU), en el marco del lanzamiento de actividades de educación continua, dirigidas al primer nivel de atención, para médicos del medio urbano y rural, que el colegio brindará a partir de este mes.

Para Cluzet, el tema debería llegar “al ciudadano común, porque este tipo de leyes tiene un gran impacto en la vida de las personas”. Aunque el proyecto de ley para despenalizar la eutanasia presentado en marzo de 2020 por el diputado del Partido Colorado Ope Pasquet será prioridad en el Parlamento este año, el Colegio entiende que el foco debe seguir en los cuidados paliativos y que “la muerte asistida debe ser concedida en casos exepcionales, cuando los cuidados no puden revertir determinada situación”, agregó Cluzet.

“En Uruguay hay una gran inequidad en el acceso a los servicios básicos de salud y uno de esos servicios son los cuidados paliativos”, consideró Cluzet. Agregó que “el temor que fundamenta la oposición a la despenalización de la eutanasia es que se ofrezca como sustituto de los cuidados paliativos a personas que no tengan acceso a ellos”. Por otra parte, el consejero entendió que “la muerte asistida debería ofrecerse a pacientes a quienes no se les pueda resolver la situación con cuidados paliativos, pero no a todos”, y no como lo plantea el proyecto, “casi como un petitorio administrativo o notarial”, según Cluzet.

Cluzet también se opone a que el médico tenga que involucrarse en el proceso de dar muerte al paciente. “Eso es algo que a los médicos les resulta extremadamente difícil, por el hecho de que la profesión se formó con otra finalidad, y sobre todo en el siglo XXI, con el enorme avance que ha tenido la medicina, tendríamos que tener en esto una especial preocupación”, consideró.

Como otra de las consecuencias, el consejero recordó que el proceso de la legalización de la eutanasia implicaría la derogación de algunos artículos del Código de Ética Médica. “En lo que estamos de acuerdo es que hay que actualizarlo, también por lo planteado en el punto anterior, pero en cuanto a avances, no a un artículo que se opone a la ley de la nación”, explicó.

Por último, Cluzet se centró en los cuidados paliativos, a los que “hoy sólo accede 60% de la población”. “En Uruguay hay un centrismo que distribuye los cuidados en Montevideo y el área metropolitana, no cuenta con una representación geográfica nacional uniforme. Creemos que el tema debe ser comprendido en toda su profundidad, pero sobre todo en los cuidados al final de la vida”.

Para Cluzet, la eutanasia “no tendría un impacto económico de ninguna naturaleza porque se resuelve el asunto sin cuidar al paciente con un equipo especializado”. Por esta razón, insistió en que “se debe acentuar el acceso y la profundización de los cuidados paliativos”. “Los equipos especializados para cuidar a los pacientes les salen caros a las instituciones, pero es de suma importancia implementarlos”, agregó.

También aclaró que la postura del CMU sugiere que el paciente pueda acceder a los cuidados antes de estar en la etapa terminal de su enfermedad. “La medicina paliativa no puede ser la medicina del agónico”, según Cluzet. Resumió que la muerte asistida debe ser el último recurso, “pero nunca sin antes haber dado acceso a los cuidados, y en el caso de aprobarse debería dejar por fuera a los médicos”. El consejero puso como ejemplo Suiza, pero señaló que se trata de un sistema que brinda los medios pero no lleva adelante la muerte asistida.

Por último, adelantó que si a nivel legislativo el debate avanza y “si el colegio es convocado a la Comisión de Salud, asistirá en el marco de que creemos que debe propiciarse una amplia discusión; no se puede retroceder, sino profundizar en la equidad del sistema de salud”, concluyó Cruzet.

El debate legislativo

En diálogo con la diaria, Lucía Etcheverry, presidenta de la Comisión de Salud de la cámara baja, contó que “las sesiones del mes pasado fueron bastante particulares porque la atención se centró en cambios de la comisión y en tratar temas que habían quedado pendientes, pero vamos a empezar a recibir delegaciones este mes”.

La diputada frenteamplista recordó que “en un momento se trataron el proyecto de eutanasia y el de cuidados paliativos a la misma vez, pero después se entendió que era prioridad abordar el de cuidados paliativos que ya cuenta con media sanción”. Agregó que quienes están interesados en asistir a la comisión de salud son diversas instituciones académicas, de la sociedad civil, públicos y privados.

Etcheverry agregó que la comisión propuso recibir a las delegaciones en un orden determinado “por las características: por ejemplo, una instancia para públicos, otra para privados, y así”.