En 39 países del mundo los casos confirmados de viruela del mono son más de 1.600, según afirmó este martes en una conferencia de prensa el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus. En tanto, el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, dijo a la diaria que todavía no llegó la enfermedad a Uruguay.

El 1º de junio habían sido anunciados por el Ministerio de Salud Pública (MSP) cuatro casos sospechosos, pero fueron descartados. Según Salinas, si bien la viruela del mono no ha llegado al país, los laboratorios están “prontos para diagnosticar”: “Estamos preparados”, subrayó.

Adhanom también informó que de esos 39 países, hay alrededor de 1.300 casos sospechosos y 79 muertes que fueron atribuidas a la enfermedad. “El brote mundial es claramente poco usual y preocupante, y por esta razón he decidido organizar y activar la comisión de emergencias para evaluar si este brote representa una emergencia de salud pública de preocupación internacional”, comunicó la OMS. Consultado por su opinión al respecto, el ministro Salinas dijo que “hay que esperar [para ver] qué dicen los expertos”.

Por otro lado, la OMS no recomienda la “vacunación masiva”, sino que hay que ver “caso a caso”. Igualmente, el director de la entidad dijo que “todas las vacunas tienen que estar accesibles para todos” y que, por ende, “se trabaja con todos los estados miembros para un acceso justo”.

“Hoy tenemos las acciones necesarias para reducir los contactos para las personas que tienen mayor riesgo”, concluyó Adhanom. En una línea similar, Adriana Delfraro, profesora grado 4 de Virología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República, dijo que en Uruguay técnicos del MSP han realizado capacitaciones brindadas por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que se tienen las “herramientas diagnósticas prontas y se están mejorando y aggiornando a las últimas indicaciones de la OPS [Organización Panamericana de la Salud] y de la OMS”.

Asimismo, según Delfraro, “tenemos una definición clara y concreta de caso sospechoso, probable y confirmado, y ahora queda el reporte cuando se considera que entra en esos parámetros”. Lo importante para la viróloga es que “se tengan las herramientas para hacer la vigilancia y el diagnóstico”.

En cuanto a la posibilidad de que la OMS decrete al virus del mono como una “emergencia de salud pública de preocupación internacional”, la viróloga señaló que “ese análisis que se va a hacer tiene muchas puntas, incluso la política”. En ese marco, afirmó que si bien los casos están en aumento, no visualiza que “estén creciendo mucho respecto de la distribución geográfica: el número de países más o menos se mantiene, hay un foco importante fundamentalmente en Europa”. Dependiendo de la “distribución geográfica y la velocidad con que se encuentran los nuevos casos” es que, según Delfraro, se verá si se “pasa a un nivel de alerta mayor”.

La académica aclaró, además, que de todos los países en los que se han reportado casos confirmados, sólo seis -de Europa- abarcan entre 60% y 70% de las infecciones. En el podio se encuentran Reino Unido, Alemania y España. “De alguna manera es un círculo vicioso: en la medida en que vos buscás, empezás a encontrar más, porque ahora se ha incrementado el diagnóstico en sí mismo por esta alerta internacional”, aseguró Delfraro, y agregó que “todos los países, y Uruguay también, han entrado en una vigilancia cercana de los casos”. Por otro lado, la viróloga afianzó que “las posibilidades de controlar” el virus “son buenas”, porque tiene un “período de incubación largo” y porque el contagio es a través del “contacto directo, de piel”, a través de las lesiones, que es “lo que más hay que cuidar”. Por esta misma razón, recordó que el aislamiento de las personas en estas situaciones es para “contener el contacto físico y de piel”. A modo de conclusión, Delfraro evaluó que “si bien ha habido un crecimiento sostenido” de casos confirmados de viruela del mono, no ve “que sea explosivo”.