En el marco del Día Mundial de la Tuberculosis, el Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Comisión Honoraria para la Lucha Antituberculosa y Enfermedades Prevalentes presentaron este lunes los datos correspondientes al año 2024 sobre la enfermedad infecciosa en Uruguay.
El año pasado, se notificaron 1.454 casos de tuberculosis; esto significa que hay 103 casos más en comparación con 2023. Por otro lado, los casos incidentes, es decir, los casos nuevos notificados en 2024, fueron 1.293.
El ascenso de los casos ha sido sostenido en los últimos años, desde la pandemia de covid-19, época en la que se vivió una caída. La tasa de incidencia es de 37 por cada 100 mil habitantes, lo que ubica a Uruguay por encima del promedio de las Américas, según afirmó Gabriela Maya, directora técnica del Programa Nacional de Tuberculosis, en la presentación de los datos.
“Nuestra responsabilidad es ver, escuchar y tomar acciones concretas a lo largo de este año, para ver si paulatinamente en el próximo quinquenio podemos ir frenando este avance que duele en un país como el nuestro”, señaló la ministra de Salud, Cristina Lustemberg.
La enfermedad predomina en el sexo masculino y en los grupos etarios más jóvenes, principalmente entre los 25 y 34 años. Maya resaltó que “el dato que nos tiene que llamar la atención” es el 10% de niños menores de 15 años con tuberculosis. Mencionó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el 10% de los casos de tuberculosis de un país son en niños, pero Uruguay no había alcanzado esa cifra hasta 2024.
En cuanto a la distribución geográfica de los casos, está caracterizada por la heterogeneidad y la focalización en Montevideo y el área metropolitana principalmente. La capital registra 857 casos (59% del total de casos) y es el único departamento con una tasa de incidencia por encima del promedio del país. A su vez, el 58% de los casos de Montevideo están concentrados en los municipios A, D y F, lo que demuestra la “inequidad de la distribución de los casos a nivel territorial”, señaló la directora, quien resaltó que se debe empezar a “caracterizar los casos de tuberculosis”.
Por su parte, Canelones, Maldonado y Salto presentaron un aumento sostenido de los casos, y se destacó el aumento significativo de Cerro Largo y Florida en 2024.
El número de fallecidos también creció con respecto a 2023, 15 más específicamente. En 2024, se registraron 148 muertes y la tasa de mortalidad fue de 4,2 por cada cien mil habitantes, también por encima del promedio para las Américas (3,4). “Uruguay no se merece tener estas cifras porque tenemos los recursos para por lo menos enfrentar esta enfermedad, prevenible y curable”, expresó Maya.
La tasa de letalidad entre las personas afectadas por tuberculosis es del 10%. Esta cifra se asocia principalmente a las personas que viven con VIH, cuya tasa de letalidad aumenta a 15%, y también a los pacientes de mayor edad: en el grupo etario de 55 a 64 años, la letalidad es de 19%; y en mayores de 65, de 34%.
Por otro lado, el porcentaje de pacientes diagnosticados con tuberculosis que acceden al tratamiento es del 91% y un 15% termina abandonando, por lo que se interrumpe el seguimiento, “la principal causa de que se mantenga en la comunidad y se siga transmitiendo”, indicó Maya.
Entre las principales conclusiones de los datos se señaló que “la prevención y atención de la enfermedad a nivel territorial continúa siendo escasa y no se logra articular con los programas sanitarios existentes a nivel de la comunidad”. A su vez, los esfuerzos interinstitucionales “son insuficientes y se articulan escasamente sin delinear una política general, por territorio o grupo de riesgo”.
Lustemberg sostuvo, al final de la presentación, que hay responsabilidades “inherentes” al MSP, pero también, para el abordaje de este tipo de enfermedades, requieren un trabajo interdisciplinario e interinstitucional. Adelantó que la próxima semana tendrán la primera reunión con las autoridades del Ministerio de Desarrollo Social para abordar este tipo de complejidades.
Poblaciones vulnerables afectadas por tuberculosis
Niños y adolescentes
Maya remarcó que “llaman mucho la atención” los datos de incidencia de la enfermedad en menores de 15 años. En comparación con 2023, aumentaron 66% y, en total, fueron 128 casos de niños y adolescentes en 2024, de los cuales 55% fueron niñas. La directora valoró positivamente que ninguno de los menores presentara coinfección con VIH y que no se registrara ningún fallecido en este grupo. Además, el 82% de los menores tuvo un contacto conocido con la enfermedad y el 72% fue diagnosticado en etapas precoces.
En cuanto a los adolescentes, de 15 a 19 años, se registraron 52 casos: 44% en varones, 79% residentes de Montevideo y el área metropolitana, 18% presentó consumo de sustancias, dos fueron personas privadas de libertad (PPL) y una en situación de calle. En este grupo, sí se presentó un fallecido.
Pacientes con VIH
En personas con VIH, la coinfección se mantiene estable y es del 12% en 2024 (176 casos), sin embargo, Maya indicó que a nivel mundial el porcentaje es de 6%. El 74% de los casos son en hombres y la edad media es 41.5 años. Además, en cuanto a las determinantes sociales, el 23% se encuentra en situación de calle, 36% presenta consumo de sustancias y 10% está privado de libertad.
La tasa de incidencia en este grupo es de 1.173 cada cien mil habitantes. Dos datos positivos son que el 91% de los pacientes conocen su estado VIH y el 36% está en tratamiento antirretroviral.
Personas privadas de libertad
Se registraron 137 casos de tuberculosis en PPL y, al momento de ingreso carcelario en Montevideo y el área metropolitana, se diagnosticaron el 40% de los casos de esta población. Casi el 100% son del sexo masculino y la edad promedio es de 31 años; asimismo, el 76% es de Montevideo y entre ellos, el 77% es de los municipios A y F. En este grupo no se presentaron fallecidos y 14% abandonó el tratamiento al egresar del sistema carcelario.
Personas en situación de calle
Se diagnosticaron 151 casos en personas en situación de calle -110 correspondientes a Montevideo-, lo que supone un aumento del 26% en relación a 2023. También en este grupo, la mayoría son hombres (84%) con una edad media de 40 años. El 26% presenta coinfección con VIH y el 68% consumo de sustancias. La cifra de abandono de tratamiento alcanza el 40% en este grupo y la letalidad es del 16%, presentándose 24 fallecidos.