La experiencia indica que el momento en que las políticas son implementadas es fundamental. Los paquetes de estímulo serán menos efectivos si se despliegan una vez finalizada la crisis sanitaria.
Someter a regímenes de vigilancia masiva y control ciudadano acotando libertades puede dejar un precedente macabro. La historia muestra que lo que fue aceptado en tiempos de crisis tarda en ser abolido.
Momentos como este, de disrupción generalizada, que se aprovecha de la fuerte interconexión global, llaman a la imperiosa necesidad de globalizar la política y la democracia, de construir instancias democráticas transnacionales.