“Cacerolear en este contexto no es una opción política, es una medida de responsabilidad sanitaria”, escribió este miércoles el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, en el portal de la central obrera. Este lunes, la Intersocial, integrada por el PIT-CNT y otras organizaciones sociales, resolvió convocar este miércoles a la 21.00 a un caceroleo y apagón por las medidas adoptadas por el gobierno.
Desde el Poder Ejecutivo la medida de protesta no fue bien recibida. El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, dijo a la diaria que le parece “injusta y desproporcionada”, pero acotó que “obviamente tienen todo el derecho de expresarse”. “La comunicación con el PIT-CNT es muy fluida y permanente, no va a cambiar ni ha cambiado por este episodio”, aseguró.
Por otra parte, el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, criticó en su cuenta de Twitter la posición de la central sindical. “Hace poco más de un mes, el PIT-CNT homenajeaba a un presidente que no hizo nada para protegernos de la pandemia que se acercaba. Hoy llama a protestar contra un gobierno que deja todo en la cancha y toma buenas medidas. Difícil de entender”, afirmó.
En diálogo con la diaria, Pereira dijo que Da Silveira opinaba sin haber leído el comunicado de la central sindical. “Hemos hecho 25 o 30 entrevistas de prensa, incluso más de lo que nos da el cuerpo y la cabeza, y en todas hemos dicho que no es contra el gobierno y que no discrepamos con las medidas que ha tomado, sino que las consideramos insuficientes para poder llegar, cuando se llegue, a una cuarentena obligatoria”, dijo.
Además, Pereira dijo que el ministro es libre de opinar lo que quiera, pero “si vio el sistema de salud de 2004 y lo compara con el de 2019, él mismo homenajearía [a Vázquez], porque estamos ante otro sistema de salud”. “Todo el mundo puede expresarse; lo que digo es que tiene un fundamento errado. ¿Faltan cosas por hacer? Claro que sí, pero no obviemos las cosas que se hicieron; si no, entramos en un mundo de necedades en el que nadie reconoce lo que hizo el otro. En el medio de la molestia, Twitter es enemigo de las buenas ideas. Lo mejor es tener el celular lejos si no hay capacidad de contenerse”, aseguró.
Con respecto al cacerolazo, Pereira aseguró que no le gusta “para nada”, pero es la forma de manifestación que se puede hacer en el contexto de la emergencia sanitaria. Además, descartó que se trate de un acto violento, como señalan algunas personas en las redes. “No nos gusta porque fue muy usada en otros momentos, pero no sólo en 1984, también durante la crisis de 2002”, opinó.