Se acerca la llegada de la primavera y, en un año tradicional, comenzarían las semanas claves de cara a la próxima temporada de verano, en las que los operadores prevén el movimiento que tendrán. Sin embargo, producto de la covid-19 y el cierre de fronteras, existe incertidumbre sobre lo que ocurrirá en el sector del turismo, que emplea a miles de trabajadores que en gran parte se encuentran cobrando el subsidio por desempleo que paga el Banco de Previsión Social (BPS).

“Para mantener los avances que ha habido en la reducción de la cantidad de personas en seguro de paro, de casi 200.000 [cuando comenzó la pandemia] a alrededor de 100.000 en tres meses, esa velocidad, ese ritmo, esa contundencia, se requiere que siga habiendo un proceso de reactivación cada vez mayor, y una de las llaves es el funcionamiento del turismo”, dijo el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, al acudir a la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda de Diputados.

Varias consultas de los legisladores opositores apuntaron a la situación del mercado de trabajo, las previsiones para la reactivación de la economía y puntualmente la situación del turismo.

Mieres respondió que “si la temporada turística se presenta más potente, más fuerte, entonces el ritmo de recuperación con respecto a la salida del seguro de paro es probable que siga siendo importante; de lo contrario, va a haber dificultades, porque se va a enlentecer”.

En ese sentido, el jerarca señaló: “Más allá de todos los esfuerzos que hagamos para la reactivación y dinamización del turismo interno, hay que saber que tiene una variable fundamental, que es el turismo que viene, sobre todo, de los países vecinos”. Agregó que existe “incógnita” sobre qué ocurrirá con la temporada de verano. “Ojalá que las condiciones nos permitan abrir las fronteras, pero obviamente controlando los riesgos del impacto sanitario. Ahí hay un punto neurálgico”, sostuvo.

Esta semana, en una entrevista para Argentina, el presidente Luis Lacalle Pou informó que el grupo de científicos que asesora al gobierno estaba estudiando un plan para el verano. “Vamos a abrir la canilla lo máximo posible, pero no vamos a atentar contra la salud de los uruguayos”, indicó el mandatario. También anticipó que en caso de que a esa altura no haya una vacuna contra el coronavirus, Uruguay tomará decisiones de ingreso por frontera “basado en países o regiones dentro de los países”, en función de los niveles de contagio y con “determinados requerimientos sanitarios”.

“Seguimiento” a empresas para dar prórrogas de seguro de paro

En otro punto de su comparecencia, el ministro de Trabajo se refirió a la decisión tomada por el gobierno a principios de agosto “de prorrogar seguros de paro de manera general e irrestricta”, atendiendo a que son variados los sectores que aún sufren los coletazos de la covid-19 y las medidas de aislamiento social.

Sin embargo, planteó una salvedad hacia adelante: “Más allá de que la potestad del ministerio puede llegar hasta cumplir el año desde el comienzo de la ida al seguro de paro de los trabajadores, hay que ir haciendo un seguimiento, porque va a haber sectores que probablemente en 90 días ya tengan una reactivación y no necesiten una nueva prórroga”.

Mieres subrayó que este control que pretenden implementar sobre las empresas que hagan la solicitud de extensión del subsidio “favorece al trabajador, porque la idea es que en esos 90 días [desde la primera prórroga] nosotros evaluemos las situaciones que van ocurriendo” antes de aceptar el pedido. En caso de no dar la prórroga, la empresa puede optar por retomar al trabajador ‒para lo que hay vigente un beneficio de 5.000 pesos en los aportes al BPS hasta fin de mes, que Mieres dijo que podría extenderse‒ o despedirlo, con el pago de la indemnización correspondiente.