Luego de que la desmonopolización de Ancap quedara fuera de la ley de urgente consideración y la coalición de gobierno dejara el tema laudado, el Poder Ejecutivo prevé cambios legales para la cadena de precios de los combustibles. Entre ellos, bajar el límite mínimo de biodiésel establecido en la mezcla para la producción de gasoil, que elabora Alcoholes del Uruguay (Alur), subsidiaria de Ancap.
Esto no fue visto con buenos ojos en la Base Alur Biodiésel, que pertenece al Sindicato de Trabajadores de la Industria Química (STIQ). Con el apoyo de la Coordinadora de Sindicatos de Ancap y la Confederación de Sindicatos Industriales, este gremio resolvió declararse en conflicto. Según señaló el sindicato en un comunicado, con el proyecto de ley que enviará el Poder Ejecutivo “se prescindirá de la mezcla mínima de biodiésel en el gasoil y se modificará la mezcla de bioetanol en las naftas”.
“Esto significa que el proyecto agroindustrial de Alur se va a ver directamente afectado con el cierre de Planta Capurro, donde produce biodiésel. Esto trae como consecuencia la pérdida de uno de los proyectos más importantes en los últimos 15 años en la producción de combustibles no fósiles y también la pérdida de la independencia energética”, sostiene el gremio. STIQ señala que a esto se agrega “el daño a la cadena de valor en la producción nacional”, sin olvidar “la pérdida de puestos de trabajo calificados, muy importantes para nuestro país, que se verán afectados de forma directa e indirecta”.
El gremio dice que el gobierno, “en su proyecto de recortes presupuestales y a favor de su política neoliberal, pretende plasmar en la sociedad un discurso que no se ajusta a la verdad, para así poder justificar la política de achique del Estado, en pos de favorecer a las multinacionales que pretenden llevar nuestras riquezas fuera del país”.
“Entendemos que las empresas estatales son y deben seguir siendo el motor dinamizador de la economía y su fin principal es el bienestar de toda la población. En este sentido, nuestra más acérrima defensa de Ancap como uruguaya y nuestra, y su colateral Alur como miembro del grupo Ancap. Dejarlas en manos extranjeras es perder la soberanía del país”, finaliza el comunicado.