Este domingo, la caravana del Sindicato de Trabajadores de la Industria Química (STIQ) que partió de Bella Unión el viernes 16 llegó a la ciudad de Canelones, proveniente de Nueva Palmira, departamento de Colonia. La movilización tiene como ejes centrales, en el marco de la Rendición de Cuentas, la defensa de las empresas públicas y el rechazo al cierre de Alcoholes del Uruguay (ALUR) y a la pérdida de 4.000 puestos de trabajo.
Este lunes a las 12.00 habrá una conferencia de prensa sobre la situación de ALUR en el local del PIT-CNT, en la que participarán dirigentes del STIQ y el secretario general de la central de trabajadores, Marcelo Abdala.
En tanto, la caravana partirá de la capital canaria, tomará la ruta 11, pasará por Santa Rosa, San Jacinto y Atlántida, donde tomará la ruta Interbalnearia hacia el oeste, para luego recorrer la ruta 34, hasta la ruta 8, y pasar por Empalme Olmos y Pando. Después continuará por la ruta 8, pasando por Barros Blancos, para tomar la ruta 74, pasar por Suárez y Sauce para retornar a la ciudad de Canelones por la ruta 107.
El delegado general de base y dirigente del STIQ Nicolás Lema informó a la diaria que el martes van a salir de Canelones a las 8.00 para llegar a las 10.00 a la puerta de la planta de ALUR de biodiésel, en la calle Capurro, para luego salir en marcha hacia el Palacio Legislativo por la avenida Agraciada.
Lema explicó que la situación de ALUR la vienen evaluando desde la aprobación de la ley de urgente consideración (LUC), que estableció la fijación de precios del combustible por la paridad de importación. Para el dirigente, el gobierno “lo que está haciendo es generar todos los ámbitos para poder favorecer a los ‘malla oro’, y obviamente el tema de bajar el costo fijo del gasoil es uno de los reclamos de las gremiales agroexportadoras”. “Y ya habían manifestado que se iban a recortar los costos del gasoil por el biodiésel”, agregó.
La incidencia del biodiésel en el precio final del gasoil está entre un peso y un peso con 20, según Lema. Para el sindicalista, no tiene sentido dejar de producir en el predio de ALUR en Pueblo Belén (Salto) y dejar sin empleo a 40 trabajadores, y agregó que “por la cadena productiva y la relación con lo social que tiene, ALUR Biodiésel es una mesa de tres patas y si sacás una pata, eso va a generar un desequilibrio muy grande en la empresa”.
En tanto, en la Rendición de Cuentas actual se incorporaron tres artículos que “quitan la obligatoriedad de mezclar biodiésel en el gasoil como una de las medidas, quitan la obligatoriedad por parte de Ancap, y quitan la obligatoriedad de producir biodiésel para mezclar con gasoil”. Para el STIQ, estos artículos implican el desmantelamiento definitivo de ALUR, que en Bella Unión se vincula con la producción de caña de azúcar y de bioetanol y abarca a “una tercera parte de la población”. “ALUR tiene unos 800 puestos de trabajo directos, pero, sumados pequeños y medianos productores, fleteros y todo lo que rodea a la producción, tenés más de 4.000 puestos de trabajo”.