El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) convocó a una rueda de prensa este jueves por la tarde para anunciar las pautas de desarrollo del Plan Nacional de Agricultura Familiar.
El subsecretario del MGAP, Juan Ignacio Buffa, recalcó el “rol fundamental” que cobra la agricultura familiar “en la seguridad alimentaria”, así como “el entramado social y cultural de todo nuestro campo”, por lo que celebró la “enorme posibilidad de discutir, plantear todos estos temas [...] y construir un plan que incorpore todas estas dimensiones complejas de la agricultura familiar”.
Buffa reconoció el “enorme desafío” que implica “poder definir y plantear, blanco sobre negro, cuál va a ser el plan de desarrollo”. Asimismo, llamó a atender las preocupaciones y participar en conjunto con los diferentes actores involucrados en “un entramado complejo y que exige miradas multidimensionales”, que va más allá de lo económico e incluye también al resto de servicios básicos.
De esta manera, Buffa celebró la posibilidad de que “por primera vez se ponga en real relevancia un plan nacional que permita tener un desarrollo armónico e integral a una enorme cantidad de personas”. “Desde el MGAP vamos a apoyar con fuerte ahínco este proyecto de trabajo que se inicia, y desear los resultados lo antes posible”, concluyó el subsecretario.
Por su parte, la subdirectora de la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR) del MGAP, Mercedes Antía, recibió con entusiasmo el inicio de la labor en torno al plan. “Tenemos poco tiempo de trabajo para adelante”, reconoció, si bien explicó que ya existen avances previos al evento de lanzamiento.
Antía recordó la experiencia recabada por el ministerio a partir de la presentación del Plan Nacional de Género en las Políticas Agropecuarias, por lo que reafirmó su creencia de que el plan “nos va a traer otras oportunidades”.
La subdirectora de la DGDR reconoció que si bien el plan atiende iniciativas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), fue el MGAP el que decidió llevarlo adelante. “Estamos convencidas y convencidos de que va a ser una buena herramienta para el mejor desarrollo de la familia rural y la producción familiar”, declaró Antía.
Mientras tanto, el director de la DGDR, Carlos Rydstrom, reivindicó la continuación de un proceso que implica “poner al servicio todas nuestras capacidades de avanzar”. Asimismo, resaltó que “Uruguay cumple con sus cometidos en el marco del diseño de la agricultura familiar” y “del desarrollo sostenible”, y celebró la existencia de políticas de Estado sostenidas en el tiempo, respetadas a pesar de los cambios de gobierno.
Aun así, Rydstrom reconoció que, a pesar de los compromisos del MGAP, “la conciencia sobre la importancia de nuestra población rural y nuestro sector agropecuario no tiene resonancia transversalmente en nuestra sociedad”. De esta manera, si bien insistió en el compromiso de llevar a cabo un plan “con los pies en la tierra y con importante proyección”, Rydstrom señaló la necesidad de “hacerlo llegar a nuestra sociedad en su conjunto”.
Por último, intervino la directora general de secretaría del MGAP y coordinadora de la Reunión Especializada de Agricultura Familiar (REAF) del Mercosur, Fernanda Maldonado, quien remarcó la necesidad de reconocer el rol de la agricultura familiar, en particular luego de los recientes desafíos alimentarios que ha debido afrontar la humanidad.
Además, y similarmente a lo expuesto por Rydstrom, Maldonado explicó que la intención es avanzar “con una hoja de ruta clara para poder llegar a propuestas bien concretas”. De esta manera, descartó que exista un “ánimo refundacional” y apuntó en su lugar a la profundización de políticas “sobre un diagnóstico profesional objetivo”, en conjunto con los diferentes actores involucrados y con toma de propuestas descentralizadas.