El economista Nicolás Cichevski, del estudio CPA Ferrere, fue este jueves uno de los disertantes en la actividad “Negociación colectiva y mercado de trabajo”, organizada por la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay y el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop).

En una rueda de prensa, consideró que el principal desafío que tendrá el gobierno de Yamandú Orsi en materia fiscal, “por varias razones, es recuperar una tasa de crecimiento más alineada al crecimiento potencial”. “Un 2,5% que uno diría que, si bien no es una tasa muy alta, es bastante más alta que la de los últimos diez años, que ha estado en el entorno del 1%”, agregó.

De cara al gobierno que asumirá en 2025, afirmó que “la principal característica del resto del mundo, pensando en los próximos cinco años, es un mundo que a priori sería algo más proteccionista”, lo que, “en definitiva, es menos comercio y menos crecimiento a nivel global, y como la principal economía afectada en este contexto, que ya venía creciendo poco, es la de China, no es un escenario favorable para Uruguay”.

Agregó que “la batería de políticas en materia de gasto social y para atender a la población más vulnerable, que es uno de los mandatos que recibió este gobierno, en ausencia de recursos y de un aumento de impuestos, requiere crecer más”.

En ese sentido, señaló que esto es relevante “porque el punto de partida de la situación fiscal probablemente sea algo mejor que en 2019, pero es bastante peor que la que preveíamos hace un año”. “El déficit fiscal está por encima del nivel necesario para estabilizar la deuda, y reducirlo requiere que Uruguay crezca más, de forma tal que haya más ingresos sin comprometer el gasto público y sin necesidad de reducirlo”, explicó.

Mencionó que esto también implica que probablemente “el despliegue de parte de esta agenda de políticas requiere reasignar gastos a nivel de gobierno, y no aumentar el gasto a nivel agregado”.

El docente se refirió a la situación actual del dólar y explicó que el tipo de cambio en el país “ha subido bastante, en línea con lo que ocurrió en el resto del mundo”. “Quizá el aspecto más relevante es el hecho de que las eventuales políticas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, en la expansión del gasto, en materia de protección y con China pueden llevar a que la inflación en Estados Unidos caiga más lento que lo previsto, y eso, en definitiva, ha cambiado las perspectivas de tasa de interés en Estados Unidos”.

Sobre qué sectores pueden verse afectados a corto plazo por el valor del dólar, el economista respondió que se va a observar “un incremento de la inflación, en particular del componente transable. Vamos a tener un repunte de la inflación en el corto plazo”.

También recordó que “la inflación transable venía en niveles de 2% o 3%, muy amortiguado por la evolución del tipo de cambio en el último año, y eso debería mover a la inflación más hacia el techo del rango meta, el 6%, y no tanto en el 5% como estamos hoy”.

Cichevski dijo que resta saber la posición del nuevo directorio del Banco Central del Uruguay (BCU), cuando este sea designado, pero concluyó señalando que “es probable que en el corto plazo, incluso en la reunión de diciembre del Comité de Política Monetaria del BCU, pueda resolver eventuales subas en la tasa de interés, para evitar que este aumento del dólar y este aumento de la inflación transable terminen en expectativas de inflación más altas”.

Con respecto a la promesa electoral de Orsi de que durante su gobierno no subirá impuestos, contestó: “Subir o no impuestos depende de preferencias, de la magnitud del gasto y de la velocidad con que se quiera desplegar las políticas. Si no quiere subir impuestos, va a necesitar crecer más y va a necesitar reasignar gastos dentro del Estado, de áreas en las que el Estado quizá no gasta bien o es más ineficiente hacia las áreas en las que el nuevo gobierno desea gastar”.