El Consejo Directivo Central de la Asociación de Bancarios del Uruguay (AEBU) se reunió este martes para analizar diversos temas, y entre ellos trató el conflicto actual entre el sindicato de trabajadores de Banco Santander y esa institución bancaria. Ante la falta de acuerdo entre las partes, decidió que el diferendo pase a ser de interés máximo, alcanzando así a toda la banca, y no solamente al sector privado como hasta ahora.
Al respecto, la diaria dialogó con el presidente del Consejo del Sector Financiero Privado, Juan Fernández, y el presidente de la Comisión Representativa, Christian Stein. Fernández informó que “el sindicato ha determinado que el conflicto con el Grupo Santander no es un problema de los trabajadores del Banco Santander. No es un problema y un conflicto en el sector privado. Ya es un conflicto con todo el Consejo Central”.
Adelantó también que, ante la eventualidad de que en un futuro, otras instituciones financieras privadas extranjeras tomen la misma posición que actualmente tiene Santander “podemos estar en vísperas muy cercanas a situaciones preliminares de un conflicto de dimensiones bíblicas, si finalmente esto contagia al resto y son todos los que deciden no respetar la legislación nacional”.
Consultado si se puede desatar una “crisis” en el sector financiero, respondió: “al menos en términos de paz laboral, sí”. Fernández explicó que “la actitud del Banco Santander y del resto de los integrantes de la Asociación de Bancos Privados, y la decisión de no renovar los convenios colectivos, y de recortar beneficios y derechos, están sustentadas en la reforma que se le aplicó a la Caja de Jubilaciones y Pensiones bancarias en el transcurso del año 2023”.
Para Fernández, los bancos decidieron que van a modificar los convenios colectivos con una reducción de beneficios. Resaltó que la actitud de Banco Santander “es distinta a las demás entidades” que integran la Asociación de Bancos Privados del Uruguay. Explicó que Citibank renovó el convenio colectivo automáticamente, y que en los casos de ITAU, BBVA y Scotiabank, si bien se vencieron sus convenios, “decidieron comunicar en tiempo y forma a los sindicatos de cada entidad de que continuarían negociando para alcanzar un acuerdo, algo que se mantiene al día de la fecha”.
Acotó que en Banco Santander había un convenio colectivo que venció el 31 de agosto, “la entidad se mantuvo firme en esa condición, y el lunes 2 de setiembre, su gerente general, Gustavo Trelles, determinó qué beneficios perdían absolutamente efecto dentro de la institución y del convenio colectivo, qué puntos de ese convenio se mantendrían y también en esa instancia otorgó algunos beneficios económicos en materia de servicios, limitados por el tiempo y también en su cuantía, para que opere de compensación por todo lo que se perdía”.
Después de esa fecha, AEBU responsabilizó a la entidad bancaria de “provocar un conflicto”, mientras que la institución negó que los trabajadores hayan perdido derechos.
Fernández remarcó que para retomar el ámbito de negociación “requiere que el sindicato suspenda las medidas y que la empresa mantenga la vigencia del convenio colectivo vencido, mientras se negocie, hasta acordar un nuevo acuerdo”.
Acerca de la decisión de Santander y el conflicto con los trabajadores, una delegación de AEBU comparecerá este jueves ante la Comisión de Asuntos Laborales y Seguridad Social de la Cámara de Senadores, a los efectos de explicar a los parlamentarios la situación. Lo mismo se realizará el lunes 16 en la Comisión de Legislación del Trabajo y Seguridad Social de la Cámara de Diputados. “Es un tema que nos excede como sindicato, y los parlamentarios deben estar informados de toda esta situación”, concluyó Fernández.
Negociación bipartita con Banco Santander.
Por su parte, Stein expresó en relación al diálogo bipartito con la entidad financiera que “fue un calco de la negociación desarrollada tiempo atrás entre AEBU y la ABPU. Fue una imposición. Fueron 30 puntos atendidos por el sindicato y 10 puntos descartados por los empresarios. Por eso hablamos de imposición y de mala fe a la hora de negociar. AEBU sí está dispuesto a dialogar, pero sin imposiciones”.
Recordó que la asamblea de trabajadores de Santander rechazó por unanimidad la postura de la entidad. “Hoy no existen acercamientos formales. Santander dice que está abierta al diálogo, pero con el mensaje de que no van a cambiar ni modificar nada, y que todo seguirá igual”, expresó.
Los beneficios que eran parte del convenio colectivo en Santander y que vencieron el pasado 31 de agosto tenían que ver con el pago de una prima por antigüedad, una escala que marca los ascensos de cargo y grado, la utilización de la guardería para el cuidado de niños, una licencia especial a los 25 años de trayectoria dentro de la institución y el denominado “viático balneario” (principalmente para aquellos que trabajan en sucursales en otros departamentos o ciudades).
A cambio de no renovar el convenio colectivo, expresa Stein, Santander ofrece una compensación económica por única vez. “Si ofrecen esa compensación es porque reconocen que otras cosas por otro lado te están sacando”, afirmó.