La empresa Cooperativa Lechería de Melo (Coleme), a través de su presidente, Boris Revello, anunció que finalizó la primera parte de la reestructura de la empresa, y que la firma procederá a la tercerización del servicio de distribución de los productos lácteos, lo cual será encargado a una empresa del departamento de Cerro Largo. Producto de esa decisión, los empleados que cumplían tareas en ese sector pasarán al seguro de paro.
En el programa Hora del campo de la emisora La Voz de Melo, el empresario informó este lunes que “en Coleme terminamos la primera parte de la reestructura. Hemos trabajado en la planta normalmente con el personal destinado a cada función dentro de la misma. En estos días, estamos empezando la segunda parte de la reestructura, que es la distribución en Melo. Estamos en condiciones de afirmar y anunciar que a partir de los primeros días de febrero, una empresa tercerizada se hará cargo de la distribución. Es un sector donde tenemos un déficit tremendo”.
En ese sentido, sostuvo que estas decisiones “nos permitirán seguir reestructurando la plantilla de funcionarios. Por otra parte, el directorio de Coleme sigue reivindicando la libertad de tomar las decisiones que entienda pertinentes para sacar la empresa adelante. Somos los dueños de la cooperativa y varias veces nos acusaron de tomar decisiones sin consultar. Y yo me pregunto: ¿consultar a quién?. ¿Consultar a quienes quieren que a la empresa le vaya mal? Seguiremos trabajando para que Coleme sea la primera empresa láctea del país”, aseguró.
Durante la intervención, dijo además que “estamos abocados a terminar con la reconversión de la industria, para dedicarnos de lleno a la cuenca. Los tambos de Cerro Largo necesitan de toda la ayuda posible, porque la fuente de materia prima de Coleme debe empezar a crecer, para que el esfuerzo que hace la industria se haga sostenible en el tiempo”. También manifestó, a modo de ejemplo, que en las últimas horas, se recolectó la cantidad de 111.200 litros de leche, y que la cantidad de 37 trabajadores en el área de distribución es demasiada para la poca cantidad de litros recolectados.
La respuesta de la FTIL
La Mesa Ejecutiva de la Industria Láctea se reunió este lunes por varios temas, y uno de ellos fue el análisis de las declaraciones efectuadas por el empresario Boris Revello. Al respecto, emitió un comunicado a la opinión pública, el cual señala: “Queremos rechazar de manera categórica las declaraciones efectuadas por Boris Revello, presidente de la empresa”.
“El empresario habla de una profunda reestructura cuyo supuesto único objetivo es salvar el cierre de la cooperativa y garantizar su continuidad. Lo que omite decir es por qué la continuidad sólo es posible expulsando a todos los trabajadores sindicalizados. El empresario habla de fragilidad de la situación económica y Coleme es una de las empresas que recibió recursos de la población a través de los Fondos de la Reconversión de la Industria Láctea (FRIL)”, dice el texto.
Agrega que “el empresario olvida, omite o esconde mencionar que fueron los trabajadores históricos de Coleme quienes en distintas oportunidades donaron jornales de su trabajo para salvar a dicha cooperativa. También olvida, omite o esconde mencionar que son las y los trabajadores históricos, vecinas y vecinos de Melo, quienes han construido la rica historia de nuestra Cooperativa”.
“Exigimos de las autoridades nacionales un pronunciamiento claro y contundente que no solamente revierta prácticas de este estilo, sino que sirva además como legado de respeto hacia las y los trabajadores. Confiamos naturalmente que nadie en el Poder Ejecutivo, particularmente en el Ministerio de Trabajo, avala estas prácticas de Revello y el directorio de Coleme. Agotaremos hasta el último recurso posible para denunciar y revertir esta situación”, concluye la declaración.
FTIL: “Hay un deterioro de la planta porque no tiene los trabajadores para hacerlo”
Por este conflicto, el dirigente de la FTIL, Enrique Méndez, señaló a la diaria este martes que “lo que dice, casi lo dice como orgulloso. Es una barbaridad. Lo que nosotros decimos en ese caso es que no es así que se está sacando el trabajo con los trabajadores de forma normal. Están sacando trabajo, pero hay un deterioro de la planta porque no tiene los trabajadores para hacerlo. Hay un deterioro de la producción, y también para cumplir con los clientes”.
Dijo además que con la decisión de la tercerización, la empresa “pretende seguir sacando a trabajadores sindicalizados. Con medidas antisindicales pretenden seguir avanzando en detrimento de lo que decía el proyecto que presentaron para recibir los fondos públicos, de que iban a mantener la plantilla. Trabajan hacia un proyecto de seguir minimizando la realidad y la dimensión de Coleme”.
Sostuvo que por la situación hay dos futuros muy preocupantes, que son “continuar avanzando hacia el cierre o seguir avanzando hacia un proyecto minúsculo que tenga un puñadito de trabajadores que eliminen al sindicato. Es complicado que ese sea el avance que propone la empresa”.
Para los próximos días continuará la planificación para instalar una carpa en el centro de la ciudad de Melo el lunes 3. Luego, 14 días después, el lunes 17 de febrero, se instalará una carpa frente a Torre Ejecutiva, en el medio de la plaza Independencia. Para esta acción se buscará el apoyo del PIT-CNT.
Comunicado de Coleme: “Poder garantizar la continuidad”
La directiva de la empresa Coleme dio a conocer este martes un comunicado, dirigido a los trabajadores, Federación Láctea y opinión pública de Cerro Largo. Expresa que “a partir del 1º de noviembre de 2024 el Directorio de Coleme, con el apoyo de sus productores, ha comenzado a realizar una profunda reestructura con el único objetivo de salvar a la cooperativa de su cierre y de poder garantizar su continuidad”.
La empresa resalta que “desde que empezó este conflicto, la Unión de Obreros y Empleados de Coleme (UOEC) y la Federación de Trabajadores Láctea (FTIL) han sido muy claros en indicar que se salvan todos o ninguno, y nosotros reivindicamos la oportunidad de mantener las fuentes de trabajo que podamos tener. Lo único que han hecho es arrastrar a empresas del sector, cuando no tienen ninguna relación con este conflicto. Todo ello conllevó nuestra renuncia a la CILU”.
Manifiesta además que “la industria láctea en Uruguay está sumergida en una profunda crisis, con cierre de plantas o líneas de producción. Coleme no es ajeno a ello y, en tal sentido, la fragilidad de la situación económica hizo que tomemos medidas urgentes para la baja en costos”. Agrega que “estas medidas han sido rechazadas y criticadas por el sindicato de Coleme y por la FTIL, entendiendo que hacemos prácticas ilegales, y en otras palabras no somos los dueños de poder tomar la libertad de nuestros destinos”.
Con la firma de su presidente, Boris Revello, el comunicado dice también que “jamás nos atrasamos en el pago de salarios, aguinaldos, licencias y salarios vacacionales, cuando otras empresas del rubro pagan los aguinaldos, licencias y salarios vacaciones en cuotas. Sin embargo, los productores han resignado una y otra vez el cobro de la leche”.
“Que la única vez que pedimos pagar una partida extraordinaria en dos cuotas (cuando a otras empresas se lo habían permitido) fue negado por UOEC y por FTIL, indicándole al Directorio anterior que se tomen fondos del FRIL para dicho pago. Hemos tenido que vender todo el patrimonio de Coleme para poder mantener las fuentes de trabajo y que nos hemos endeudado fuertemente. Hoy no tenemos más nada que vender y ya no podemos endeudamos”, expresa el texto.
Confederación de Sindicatos Industriales apoya a trabajadores de Coleme
La Confederación de Sindicatos Industriales (CSI), mediante una declaración, expresó su preocupación por la situación de los trabajadores de Coleme, en Melo. “La CSI apoya en todos sus términos la reciente declaración emitida por las y los compañeros organizados en la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) que rechaza categóricamente recientes manifestaciones del presidente de Coleme, Boris Revello, quien se refiere a una ‘profunda reestructura para salvar el cierre de la cooperativa’, omitiendo señalar que ‘la continuidad sólo es posible expulsando a todos los trabajadores sindicalizados’”.
La organización adhirió a las expresiones manifestadas en el último documento de la FTIL, donde se sostiene que “despedir a trabajadores sindicalizados y tercerizar áreas es miserable [...]”. La CSI anuncia que apoyará cualquier medida llevada adelante por las y los trabajadores de Coleme y de la FTIL. No permitiremos más atropellos por parte de la patronal y llevaremos adelante todas las acciones que estén a nuestro alcance para revertir el permanente avasallamiento de los empresarios a las y los trabajadores organizados”.