La Federación de Trabajadores de Ancap (Fancap) ocupó este viernes durante algunas horas la refinería de La Teja, en el marco del conflicto que atraviesa desde julio con las autoridades de la empresa estatal por el presupuesto. La medida fue sorpresiva y ejecutada días después de que se ocupara, también temporalmente, la planta de La Tablada.

En diálogo con la diaria, el presidente de Fancap, Salvador Sprovieri, señaló que la ocupación de este viernes responde a que “el martes pasado tuvimos una reunión en el Ministerio de Trabajo y Ancap solicitó 24 horas para analizar los planteos de Fancap, [pero] sin mandar una respuesta”.

Según Sprovieri, lo único que propuso la empresa pública fue “una convocatoria a una nueva reunión”. “Como quedamos esperando la respuesta, decidimos activar las medidas sorpresivas; ahora estamos a la espera de algún movimiento de Ancap”, señaló.

En cuanto a las reivindicaciones del sindicato, Sprovieri dijo que el reclamo de mayor ingreso de personal “viene bastante complejo” y que en “lo que tiene que ver con las inversiones creemos que se están quedando cortos”. “Vamos a seguir por lo menos hasta el 15 de agosto en esta etapa de medidas, buscando aumentar el nivel de negociación, ya sea para ingreso personal o para inversiones, pero viene bastante corto el tema”, resaltó. Señaló que en la empresa estatal “se perdieron 800 vacantes en los últimos diez años”, mientras que, al mismo tiempo, hubo procesos de tercerización.

El presidente de Fancap reconoció que en la última reunión con las actuales autoridades de la empresa pública “cambió la tónica de la negociación” y hubo “por lo menos una apertura posible para llegar a acuerdos”. Sin embargo, señaló que, “más allá de que hubo algún cambio positivo en cuanto a la actitud, eso se tiene que traducir en algo escrito, porque es la única forma que tenemos de evaluar la posibilidad de levantar las medidas”.