De pequeño ya ayudaba con las tareas de la cocina, como revolver la mermelada, amasar o estirar la masa de la pizza sobre la pizzera. Donato Descubrió que quería dedicarse a la cocina a los 14 años, cuando todos sus amigos pensaban qué carrera universitaria elegirían. En busca de ese destino viajó hacia Milán, ciudad que lo formó en su actual oficio. Poco a poco fue ganando terreno hasta dar sus primeros pasos en la cocina del restaurante L’Antica Osteria del Teatro en Piacenza, así como en restaurantes y casas privadas de la ribera italiana.

Uno de sus trabajos más remarcables fue con Gianni Versace, en la que llegó a encargarse además de la cocina, de todos los detalles -transporte, masajistas, preferencias culinarias- que determinarían el bienestar y la comodidad a la hora de recibir invitados de lujo como las artistas Madonna, Cher y distintas celebridades. Dos años le costó convencer a Versace de que quería irse a Argentina, lugar que pisó por primera vez en 1997 buscando nuevas oportunidades. Finalmente, en 1999 se instaló y permaneció allí hasta hoy, que consolidó una personalidad versátil, ya que no sólo tiene su propia empresa de catering, sino que incursionó en la docencia en el Colegio de Cocineros del Gato Dumas y diversos talleres, y trabajó en televisión en varios programas del canal Gourmet.com. Su labor en estos terrenos fue reconocida con varios premios Martín Fierro, además de permitirle ganarse el cariño y la admiración de todos los televidentes como producto de la frescura y sencillez con que conduce sus programas. Prueba viviente de tales características fue su presentaciónen Montevideo en La cucina da Nord a Sud organizada por el Instituto Italiano de Cultura y la Embajada de Italia. La actividad contó con la presencia de Dr. Francesco Jurlaro, director del Instituto Italiano de Cultura, y del embajador italiano Guido Scalici. Asimismo, pudieron verse muchas personas de la comunidad italiana como pez en el agua, ya que aprovecharon la ocasión para comunicarse en su idioma materno, sintiéndose tal vez un poquito más cerca de su Italia natal como producto del acento que De Santis tiene al hablar, que a pesar de los años de residencia en Argentina todavía conserva de forma muy marcada.

Cucina spettacolare

Al contrario de lo que todos esperaban, Donato entró a la sala por la parte de atrás, bailando y cantando mientras bajaba las escaleras hasta llegar al escenario donde lo esperaba una cocina armada con todos los ingredientes listos para cocinar. “Cada uno tiene su propia tradición, su propio dialecto, su propio idioma culinario, pero para hoy hemos elegido algunas recetas”, comenzó diciendo, mientras se ataba un pañuelo en la cabeza, explicando que esos pañuelos multicolores son parte de una costumbre de su tierra (La Puglia). Los usaban tanto su madre como su abuela a la hora de cocinar porque les da un sentido de pulcritud a la cocina. Las recetas elegidas fueron: bagna cauda con tortino de pimientos como entrada; como plato fuerte dos tipos de pasta: tortellonis y sagne con sus respectivas salsas y para el postre cartellate, una especie de canastita frita con nueces por encima. A medida que iba preparando sus platos con el gran histrionismo que lo caracteriza, los olores comenzaron a tomar cuerpo hasta invadir la sala. No faltó lugar para anécdotas sobre su tierra que recuerda con anhelo, además de pequeños consejos culinarios que iba mechando entre tarea y tarea: “El punto de una buena masa es cuando al agarrarla con la mano está húmeda pero no pegadiza”.

Cabe acotar que a la hora de formar la pasta, la humedad propia del clima no fue de gran ayuda, pero aun así supo ingeniárselas y explicó: “Esto no salió de lo mejor porque en el clima seco y aireado de La Puglia basta abrir la ventana para secar la pasta; sin embargo, en un lugar húmedo como es el Río de la Plata hay que dejarla toda la noche”.

Ni por un instante perdió la retroalimentación con su público: “El que quiera hacer preguntas por favor levante la mano, grite, rompa algo. No tengan miedo de preguntar, que después me dicen: “¡¿cómo era que se hacía?!”. Y así fue, cada uno evacuó sin vergüenza sus dudas, e incluso algunos sirvieron de asistentes pasando al frente a demostrar sus dotes culinarias.

Desde el escenario Donato contó: “El otro día una entrevistadora me dijo: ‘yo miro tus recetas pero cuando las voy a hacer no me quedan igual, ¿cómo hago?’. Y yo le contesté: ‘a mí me encanta cantar, yo veo a Pavarotti y cuando trato de hacer lo mismo en la ducha no me sale igual… bueno esto es lo mismo’”, comentó, tratando de mostrar que los platos no eran tan complejos como parecían y que es cuestión de práctica.

Una vez finalizado enteramente el menú, los platos fueron repartidos en la audiencia utilizando una pequeña trivia inspirada en su tierra ¿Cuántas provincias tiene La Puglia? ¿Cuántas son las regiones de Italia? El que contestaba correctamente se hacía acreedor de uno de sus manjares. Pero debemos agregar una columna más en el haber de De Santis: los libros. Es el autor de Fatto in casa y Donatto per bambini, entre otros títulos. Por eso para terminar la jornada realizó la presentación de su último libro Cucina paradiso, una recopilación de recetas y fotos familiares que, al igual que los diferentes platos, fue sorteada entre los presentes dando cierre a su gran demostración.