El Centro de Investigaciones Económicas (Cinve) destacó que el paquete de medidas anunciado el 6 de junio por parte del equipo económico es un “cambio de prioridades”, que busca atender la apreciación del peso, lo que junto a un “incipiente” cambio de fase en el mercado financiero internacional “derivaría en un incremento de los precios transables mediante el incremento en el tipo de cambio”. En su “informe sobre inflación” emitido ayer, la consultora señala que dichas medidas “pondrían la inflación en un nivel superior al esperado”. En este sentido, en el informe correspondiente a mayo la consultora esperaba una tasa de inflación de 7,6% para fin de año, pero corrigió al alza su previsión en siete décimas, situándola en 8,3% a fin de año.

Según el informe del Cinve, los anuncios evidencian una mayor preocupación de las autoridades por la entrada de capitales especulativos y su efecto sobre el tipo de cambio y las cuentas fiscales, y entienden que a pesar de los cambios anunciados en la política monetaria, las medidas no son una mejora “en el combate contra la inflación”. Tanto el pasaje a la cantidad de dinero como instrumento de política monetaria, como la ampliación del rango meta y un horizonte mayor de evaluación de política monetaria, “introducirían en el futuro mayor volatilidad en las tasas de mercado en moneda nacional y en el tipo de cambio”. Además, el Cinve considera que el régimen de agregados monetarios tiene “limitaciones” en cuanto a “su transparencia, disponibilidad de información y entendimiento por parte de los agentes”, y destaca que existe evidencia empírica que señala que los agregados monetarios tienen baja incidencia en el control de la inflación cuando ésta se ubica por debajo de 10% anual.

Poné tercera

Para la consultora, la economía continúa desacelerándose y además se verifica un enlentecimiento en los aumentos salariales, “que aunque continuarán creciendo por encima del 10% nominal, reducen sus incrementos respecto al año anterior”.

Ambos hechos determinarían una reducción de presiones de demanda sobre los precios domésticos. Además, es esperable que los precios internacionales se mantengan estables, aunque para el Cinve “el mercado” comienza a dar señales de un “cambio de fase a nivel global”, lo que impactaría en variables “relevantes” para Uruguay. En este sentido, mencionan que Estados Unidos está dando indicios “más firmes” de recuperación, lo que permite augurar un escenario de alta liquidez internacional, lo que a su vez determina el fin de las bajas tasas de interés. Según el Cinve, el anuncio del fin de la política expansionista por parte de la Reserva Federal “ya comienza a internalizarse en el mercado financiero”, observándose un aumento del valor del dólar a nivel internacional. De concretarse este escenario que Cinve califica como “esperable”, las tasas de interés se elevarán y se reducirá la llegada de capitales, además de que el dólar se apreciará y los precios de los commodities se reducirán. Sin embargo, aclara que “no se esperan correcciones dramáticas en el corto plazo”. En particular, aunque el petróleo se encuentra por debajo de la referencia de ANCAP (110 dólares por barril de la variedad Brent), el alza en el tipo de cambio minimiza “toda posibilidad de reducir el precio de los combustibles”.