En junio, funcionarios del Centro Nacional del Quemado (Cenaque) salieron a la prensa para reclamar que no se habían pagado los aguinaldos. Con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social mediante, el pago se concretó, pero los trabajadores adelantaron que se utilizó un dinero reservado para los próximos meses, por lo que podrán cobrar los futuros sueldos pero no los aumentos previstos.
Beatriz Mansilla, secretaria del gremio de funcionarios del Cenaque y auxiliar de servicio de la unidad, calificó, en diálogo con la diaria, la situación de los trabajadores como de “alerta”. Explicó que si bien se pagaron los aguinaldos, “se hizo con un adelanto que dio el Fondo Nacional de Recursos (FNR) de la remesa de agosto, por lo que se agrandó el déficit”.
Los trabajadores aspiran a una solución de fondo, y pretenden convertirse en un Instituto de Medicina Altamente Especializada (IMAE) independiente. En la actualidad el centro existe gracias a un convenio interdisciplinar entre la Universidad de la República y el Ministerio de Salud Pública. “El Cenaque no tiene un presupuesto para funcionar. Las entradas de dinero son solamente cuando hay un quemado”, detalló. Y es el FNR el que paga por los pacientes que ingresan.
En relación a este punto, los trabajadores redactaron una carta que enviarán a distintos legisladores, en la que se plantea la situación del centro. Sobre el pago que realiza el fondo, se indica que “se paga por paciente quemado menos de lo que paga un paciente polivalente en cualquier CTI, siendo que el costo de las curaciones de un quemado es muy oneroso”. Asimismo, en la nota se indica que desde 2011 “el arancel costo paciente está congelado desde 2011”.
Al ser consultada por la continuidad del trabajo, Mansilla aclaró que si bien siempre hay pacientes, normalmente entre 10 y 12, pretenden “funcionar de una manera tal que tengamos un presupuesto fijo, tengamos pacientes o no”.
A los problemas de dependencia financiera se les suma que 45% del personal tiene contrato de suplente pero trabaja en forma fija. Según la vocera, hay quienes hace nueve años que están en esta situación.
El objetivo del gremio no es convertirse en una dependencia que se rija por regímenes de salud pública, sino de privada. “La mayoría trabajamos en dos lados. Lo mejor es pasar a un IMAE independiente”, aseguró.
Por el bien de todos
Hace 18 años que funciona el Cenaque. Está ubicado en el piso 13 del Hospital de Clínicas, y en la actualidad cuenta con 17 camas (seis de CTI y 11 de cuidados intermedios) y 250 funcionarios.
Mansilla sostuvo que hace 20 años, 75% de los quemados por vía aérea (por ejemplo, por intoxicación) fallecía. Ahora el porcentaje se redujo a 10% “gracias a los avances del Cenaque”. “Es un IMAE donde van todos los quemados del país, de salud pública o privada. Si se quema el presidente [José] Mujica, un preso, un hurgador, cualquier gran quemado, éste es el único lugar en el que se puede atender”, comentó.
Definió al quemado como un “paciente caro” que requiere mucho personal para su atención, que esté altamente especializado.
Con el fin de mantener el nivel de atención, solicitarán a los legisladores mediante una meta, “referentes de la política nacional”, “apoyo e interés por solucionar de una vez por todas la falta de presupuesto para el centro, que tiene que estar preparado en cuanto a sus recursos materiales y humanos para atender cualquier tipo de situación de desastre, pues el quemado no se anuncia, no se prevé, sucede nomás”.
Con la nota pretenden que ningún representante “diga no estar enterado” de la situación del Cenaque, y quedan a disposición para mandar material específico sobre el centro y su historia a los diputados, senadores y a “aquel al que el tema le preocupe”.