Danubio, campeón del Apertura 2013, le ganó por 3–0 a Wanderers, ganador del Clausura 2014, y ahora, a partir de la otra semana, empezarán a definir al mejor de dos partidos el título de campeón Uruguayo 2013-2014. Lo que jugaron el domingo fue la semifinal única, ganada por los danubianos, que ahora enfrentarán a Wanderers, que ya estaba de oficio como finalista por haber ganado puntos en la anual. Danubio no tenía otra que ganar, ya que si hubiesen sido los bohemios los triunfadores directamente se hubiesen quedado con la copa.
La victoria de los franjeados les permitió además clasificar a la segunda fase de la Libertadores de 2015, dado que al asegurarse un lugar en la final será Uruguay 1 o Uruguay 2 en la próxima edición copera, al igual que Wanderers. Esto generó un corrimiento en la clasificación por la tabla anual, dado que Nacional, que hasta ayer jugaba en la segunda fase de la Libertadores, ahora deberá empezar desde la primera fase eliminatoria, mientras que River, que por la tabla anual iba a ingresar por primera vez en la Libertadores, ahora deberá jugar la próxima Sudamericana, que empezará en agosto de este año.
La victoria danubiana fue inobjetable, contundente. Wanderers nunca le pudo encontrar la vuelta a un encuentro que se resolvió con goles del coloniense Federico Ricca y Leandro Sosa en el primer tiempo, y de Fabricio Formiliano en la segunda parte.
Danubio empezó muy enchufado y, a veces, más de la cuenta, se pasó un poco de rosca en su fortaleza física. Pasados los primeros 15 minutos empezó a ganar el medio de la cancha y ahí el desarrollo del partido. A los 20 minutos, con el gol de cabeza de Federico Ricca capitalizando un buen centro de Sosa en un tiro libre, pasó a ser mejor. Presionaba, recuperaba la pelota y salía rápido. Complicó mucho por la franja derecha con Nachito González. Lo sufrió mucho Maxi Olivera. Danubio, que había planificado a través de Leo Ramos su partido perfecto, a pesar de la ausencia por lesión de Jonathan Álvez se hizo muy fuerte en todos los sectores.
Wanderers no pudo jugar en la cancha arriba y no generó ni una jugada de riesgo para el solvente Salvador Ichazo. La lesión de Guzmán Pereira y el cambio por Albarracín dejaron muy solo a Santiago Martínez y expuesto en defensa. Fueron dos los goles recibidos en esos primeros 45, pero pudieron ser tres.
En la segunda parte, con el ingreso del floridense Fernando Cabrera por Riolfo, quedó parado primero con un 4-3-3 y empezó a jugar como pudo, arrimando contra el arco de Danubio. En adelante, el equipo wanderista generó las primeras situaciones claras y falló, pero Danubio volvió a su mejor papel con una memorable gestión del salteño Bruno Fornaroli, y en una falla defensiva de Cristóforo llegó al tercer y definitivo gol del partido por parte de Fabricio Formiliano. Sólo iban nueve de la segunda parte y el partido ya tenía una amplia diferencia en goles, que pudo haber sido mayor si Cristóforo no se hubiese reivindicado con un par de grandes atajadas.
Nunca pudo Wanderers con el orden táctico y la estrategia acertada de Danubio, de cerrarle todos los caminos al toque, y así se consumó la victoria.
Ahora deberán definir al mejor de dos finales, que en principio se jugarán en la noche del martes 3 de junio y del sábado 7, y si ahí en ese segundo match quedan empatados en puntos y diferencia de goles, deberán definir o bien en una prórroga de 30 minutos, o hasta por penales si se mantuviese la igualdad.