Nueva Zelanda y Australia jugarán el sábado la final del Mundial de rugby, luego de haber conseguido imponerse en sus respectivas llaves semifinales. Ayer los australianos -campeones mundiales en 1991 y 1999- derrotaron a Argentina 29-15 en un durísimo partido en el que los Pumas metieron y metieron, pero terminaron cayendo ante un oponente superior. Los argentinos ahora tendrán que jugar el partido por el tercer y cuarto puesto el viernes a las 17.00 contra la selección sudafricana, que el sábado perdió su boleto a la final tras caer 20-18 con los neozelandeses, actuales campeones, que en la final del sábado intentarán conseguir su tercer título mundial (fueron campeones en 1987 y 2011).