El Ministerio del Interior anunció ayer la creación de un cuerpo policial de “alta especialización” que actuará en las zonas “con mayor crisis de seguridad”. Según explicó el jefe de Policía de Montevideo, Mario Layera, esta unidad se servirá de los sistemas de georreferenciación adquiridos mediante un acuerdo con la Policía de Nueva York. “Por ahora, lo único que hacen es señalar los lugares en donde hay muchos negros”, reconoció Layera, aunque aclaró que se están haciendo “los ajustes necesarios para el medio local, que permitirán reconocer las zonas de mayor concentración de planchas”.
El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, explicó que la creación de este nuevo cuerpo es un paso “necesario y fundamental” para la estrategia de la cartera de combate al delito. “Las zonas donde hay mayores niveles de violencia son diferentes del resto de la ciudad. La idea es que esta nueva unidad actúe en esas zonas para volverlas aun más violentas”, sostuvo. El plan de las autoridades consiste en aplicar una dosis inicial de abuso policial, con el objetivo de desatar a mediano plazo una espiral de violencia que lleve a los delincuentes a matarse entre sí. “Es una cuestión matemática: cuántos más ajustes de cuentas, menos delincuentes”, aseguró el jerarca, y explicó que se llegó a esa conclusión utilizando “un software de alta tecnología” comprado al gobierno de Corea del Sur por 14 millones de dólares.
Bonomi destacó que una de las características de los 1.000 policías que integran este cuerpo es que tienen horarios flexibles, por lo que pueden concentrar su actuación en los momentos en que hay mayor cantidad de delitos. “Como el ingreso al cuerpo es voluntario, creemos que la inmensa mayoría de sus integrantes van a ser efectivos que tienen una especial aversión a las personas en situación vulnerable y una buena disposición para tratarlas con altas dosis de sadismo. Lo hacen por una cuestión de vocación, así que para ellos, más que un trabajo, es un entretenimiento”.