El lunes se supo que el comité disciplinario de la FIFA sancionó a Joseph Blatter, ex presidente del organismo, y Michel Platini, ex presidente de la UEFA, con una prohibición de ocho años de realizar cualquier actividad relacionada con el fútbol. Si bien en un principio la sanción parece dura, el impacto real sobre ambos ex dirigentes no sería demasiado significativo. “Blatter hace tiempo que no hace nada relacionado con el fútbol. Su principal actividad son los fraudes financieros, algo que a esta altura es imposible relacionar con el fútbol. En el caso de Platini, hace como diez años que no patea una pelota. En todo caso podría jugar en la cárcel, si es condenado, pero ahí la FIFA no tiene ninguna autoridad. La Justicia europea lo prohíbe expresamente para evitar que el sistema penitenciario se vuelva demasiado corrupto”, aseguró un periodista deportivo alemán.
Ayer también se conoció la noticia de que el uruguayo Eugenio Figueredo, ex directivo de la FIFA, la Conmebol y la Asociación Uruguaya de Fútbol, que fue encarcelado en Suiza acusado de varios cargos de corrupción, será extraditado a Uruguay. Si bien el fiscal que solicitó su extradición aseguró que no contará con el beneficio de la prisión domiciliaria, la abogada defensora de Figueredo se manifestó confiada en revertir esta decisión. “Confiamos en que José Mujica, que es nada más ni nada menos que senador de la República, va a estar de nuestro lado. Si pidió que les aplicaran prisión domiciliaria a militares asesinos y torturadores, imagínese la fuerza que hará para que este viejito de 82 años que lo único que hizo fue robar unos mangos se vaya para la casa”. La defensora del imputado aseguró que su defendido está “más que dispuesto” a cumplir prisión domiciliaria “en la mansión de Punta del Este que se compró gracias a las coimas que viene cobrando desde hace décadas. Son recintos de máxima seguridad, porque en su interior hay piezas de arte que valen centenares de miles de dólares y cajas fuertes en las que se guardan millones de dólares en billetes usados de uno y cinco”.