Los tricolores piensan en la definición del Campeonato Uruguayo. No saben el rival, pero sí es seguro que ellos estarán. Resulta difícil entender cómo un equipo que hizo una excelente primera parte de temporada en cuanto a resultados, ganó el Apertura de punta a punta y se quedó con la tabla Anual sigue probando futbolistas y posiciones cuando queda apenas una fecha del Clausura. El empate sin goles ante los pedrenses en el estadio Centenario le permitó a Álvaro Gutiérrez otorgar minutos a distintos futbolistas y seguir ajustando para la definición. Seguramente, el DT la tenga clara desde adentro y por eso los cambios que se vieron los últimos fines de semana.

Ante las ausencias de Álvaro Recoba, Ignacio González y Gastón Pereiro, Gonzalo Nano Ramos se metió entre los 11 titulares. Y no lo hizo mal. Por delante de los volantes Gonzalo Porras y Diego Arismendi, Ramos fue mejorando su nivel con el correr de los minutos y con el ajuste de sistema para el complemento, apostando más a la figura del enganche por parte del entrenador. Santiago Romero estuvo en el lateral, y en la zaga jugó Diego Polenta, que llegó a cuatro amarillas, y es casi un hecho que se lo reservará el próximo fin de semana.

En el inicio, Iván Alonso fue la referencia, con tres llegando por detrás. Luego, Tabó, Bueno y Fernández lo acompañaron más por los costados, y Ramos intentando ser el armador. Gonzalo Porras fue muy importante en la mitad de la cancha, siempre aportando una salida prolija. Rodrigo Viega buscó manejar los hilos de su equipo, que no repitió lo hecho en fechas pasadas, siendo uno de los mejores de este Clausura. En la segunda parte, Nacional estuvo mucho más cerca del arco adversario y quedó en la puerta de convertir en más de una ocasión. Mereció mejor suerte, en comparación con lo realizado por su rival. Carini fue importante dentro de un elenco de Juventud al que le costó mucho el segundo tiempo.

Los pedrenses sumaron para la Anual, en ese afán por alcanzar una copa internacional, y dependen de sí mismos.