Hoy comienzan las semifinales de la Copa del Mundo de fútbol femenino que se está disputando en Canadá desde el 5 de junio. El domingo culminará el mes de competición al realizarse la final en Vancouver.

La semana pasada fue la de los cuartos de final: los cuatro partidos se cerraron con mínima diferencia, incluyendo el empate 1-1 del partido Alemania-Francia, visto como una final anticipada. En ese encuentro las francesas tuvieron más minutos de predominio pero, al final, en el quinto penal -el único no convertido- la golera alemana, la excelente veterana Nadine Angerer (36), le atajó el disparo a Lavogez, que había entrado a los 69 minutos por la delantera derecha Thomis. 5-4 en tiros penales y las francesas, terceras en el ranking FIFA y de delicada técnica, quedaron afuera por una cuestión de cruces y organigramas. Pudieron llegar, por su calidad de juego, a disputar la final o la semifinal.

Las japonesas, campeonas vigentes, avanzaron en la defensa de ese título obtenido en Alemania hace cuatro años. Le ganaron a Australia 1-0 con un gol de su jugadora menor, María Iwabuchi (22). Las australianas venían de eliminar a Brasil con un ajustado 1-0 en octavos de final. Otra selección favorita, Estados Unidos, salvó el cruce con China por otro 1-0. Las estadounidenses siguen con un solo gol en su valla, el recibido en el 3-1 ante Australia en el debut.

Finalmente, la selección local cayó derrotada 2-1 por Inglaterra en partido muy bien llevado por la árbitra uruguaya Claudia Umpiérrez, asistida por Luciana Mascarañas. 54.000 personas asistieron para ver a sus compatriotas canadienses caer, no sin realizar un gran esfuerzo. Hoy a las 20.00 en Montreal se enfrentarán Estados Unidos y Alemania, mientras que mañana jugarán Japón-Inglaterra, a la misma hora, en Edmonton.