El handball uruguayo está entre los cuatro mejores de toda América. Ésa es la primera conclusión a la que llega cuando todavía no se termina de disputar el torneo de este deporte en los Juegos Panamericanos. Hombres y mujeres se metieron en las semifinales, con un nivel excelente y mostrando el salto de calidad que ellos esperaban. Los hombres llegaron a Toronto dispuestos a pelear por el bronce. Ése es su objetivo y ahora están muy cerca de alcanzarlo. Tras vencer a República Dominicana de manera cómoda, perdieron con Brasil y, ayer, contra Canadá, consiguieron una nueva victoria con comodidad. “Estamos a un nivel alto, todos hacen goles, todos aportan para el equipo, pero siempre podemos dar un poco más”, explicó Alejandro Velazco, mostrando que este equipo no se conforma con lo que ya logró. La sorpresa para los varones es haber ganado esos dos partidos de forma tan cómoda: no lo esperaban.

Velazco, además, resaltó que Brasil y Argentina están un escalón por arriba. Uruguay ya perdió con Brasil, y con Argentina jugará la semifinal mañana a las 21.30 de Uruguay. Pese a eso, la oportunidad que tienen adelante es muy grande y los charrúas no se achican. Velazco aseguró: “Ahora vamos a salir a ganar y tratar de clasificar a los Juegos Olímpicos. Es una chance única de conseguir el milagro y clasificar a Río”. Federico Rubbo lo confirmó y fue tajante cuando dijo: “No vamos a regalar el partido de antemano”. Habrá que ver si mañana pueden dar el batacazo.

En la rama femenina, las uruguayas ya dieron la sorpresa. Le ganaron a Cuba el lunes 33-28. Tenían que hacerlo por una diferencia de cuatro goles o más, y lo consiguieron. “En el Panamericano, hace un mes, perdimos por 20 con ellas. Creo que entraron confiadas, pero de a poco lo fuimos llevando”, contó Patricia Ré, golera del equipo. Ré fue titular contra Argentina, pero a los pocos minutos de empezar fue sustituida por lesión y en el encuentro contra Cuba no tuvo minutos. Ahora el rival es Brasil, hoy a las 14.30. “Nosotras no tenemos nada para perder. Son las campeonas mundiales y tienen jugadoras profesionales que juegan en Europa. Es muy difícil, pero las cosas se resuelven dentro de la cancha”, sentenció.

“Lo de las chiquilinas ayer contra Cuba fue una cosa tremenda. Yo estaba en la cancha y fue increíble, lo que jugaron fue descomunal. Estamos contentos por el handball: todos en semifinales y peleando por un lugar en los Juegos Olímpicos y una medalla”, resumió Velazco. Dos partidos entre hoy y mañana, en los que Uruguay va de punto y no tiene miedo de pelear contra dos de los mejores equipos del mundo. De todas formas, si no cosniguen el pase a la final, ambas selecciones podrán pelear por el bronce. El viernes, en el caso de las mujeres, y el sábado la rama masculina.