El Ministerio del Interior (MI) presentó ayer los datos de su Observatorio de Criminalidad correspondientes al primer semestre de este año. Un funcionario de la cartera se disculpó ante los periodistas por haber hecho la presentación un feriado. “Si hubiéramos sabido que íbamos a tener todo este lío con la educación, lo hacíamos un día de semana. Pero como no nos imaginamos que podía pasar algo así, decidimos hacerlo un 25 de agosto, que es un día en el que la gente está descansando o recuperándose de las resacas y no se entera de nada”. Como viene ocurriendo desde hace años, las autoridades hicieron especial énfasis en el hecho de que muchos de estos homicidios (43% en este caso) se debieron a ajustes de cuentas y conflictos entre criminales. “Si bien la situación preocupa, es bueno comprobar que la gente de bien, en términos generales, no se asesina entre sí. En casi la mitad de los casos son cosas de malandros”, aseguró el ministro del Interior, Eduardo Bonomi. Desde la cartera consideran que esta tendencia justifica una reforma en el Código Penal. “No queremos que estos hechos dejen de ser considerados homicidios, por supuesto. Pero sí se podría incluir la figura de ‘algo habrá hecho’. Es decir, si se encuentra a un delincuente acribillado a balazos, el juez podría procesar a su homicida por ‘asesinato a alguien que seguramente hizo algo’.
Bonomi afirmó que el ajuste de cuentas “no es algo ante lo que haya que permanecer indiferente”, pero reconoció que es un tipo de delitos que no presenta grandes dificultades a la hora de investigarlo, ya que “cuando se llega a la conclusión de que fue por un problema de drogas, no buscamos al culpable, porque suponemos que en algún momento a él también lo van a matar”.
Según los datos del MI, la principal causa de muertes violentas siguen siendo los suicidios. En este sentido, el ministro también hizo algunas distinciones. “Una buena parte de las personas que se suicidan lo hacen porque están deprimidas, pero hay muchas otras que en realidad tienen motivos de sobra para suicidarse. Creo que aquí habría que crear la figura de ‘suicidio por sentido común’”.