En los últimos años, Héctor Amodio Pérez había dado a conocer sus opiniones mediante algunas entrevistas y una carta enviada a los medios de comunicación. Si bien el ex militante tupamaro en ningún momento se mostró arrepentido por su accionar, dio a entender que su etapa de militante político y luego colaborador de la dictadura había terminado. Según sus palabras, más allá de algunos “episodios puntuales” de delaciones a vecinos del pueblo español en donde vivió durante las últimas décadas, había abandonado su costumbre de darles las espaldas a sus aliados para transformarse en su enemigo. Pero hace un par de meses un acontecimiento alteró su vida. El periódico El País lo contactó para que viniera a Uruguay para conceder una entrevista exclusiva y presentar un libro. “Yo venía trabajando con El Observador desde hacía un par de años, dándoles exclusivas todo el tiempo, muchas de las cuales fueron trampolines para que el periodista Gabriel Pereyra se convirtiera en uno de los principales referentes del periodismo latinoamericano. Pero cuando El País me ofreció un viaje y un par de días de hotel, no dudé en traicionar a El Observador para irme con ellos”, aseguró Pérez. Fuentes de la redacción de El Observador reconocieron que Pereyra “monta en cólera” cada vez que en su sección aparece la frase “en declaraciones en una entrevista al periódico El País”.
Debido a este episodio, Pérez les “agarró el gustito” nuevamente a las delaciones, y el pedido de procesamiento con prisión realizado ayer por la fiscal Stella Llorente por su participación en crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura le dio una “oportunidad perfecta” para retomar sus hábitos. En efecto, ante su posible encarcelamiento, el ex tupamaro ya anunció que entregará a la Justicia “todos los nombres que se le vengan a la mente” a la hora de señalar a los militares que participaron en esos crímenes. “Ya le pedí al juez que me dejara acompañarlo a visitar los cuarteles y las reuniones del Círculo Militar, porque quiero redimirme y demostrarle a la izquierda que yo siempre estuve en contra de los militares”.