Luego de ir ganando prácticamente todo el partido con Argentina, la selección celeste no pudo rematarlo y terminó cayendo en los últimos minutos 90-87 en su primera presentación en la segunda fase del Preolímpico que se está disputando en México. Una pena, porque fue un gran partido de los uruguayos, sostenido sobre todo en una defensa cerrada y muy física. El más destacado fue Mathías Calfani, amo y señor de las dos tablas: sumó 20 puntos y bajó 17 rebotes. El pivot fue bien secundado por Mauricio Aguiar y Bruno Fitipaldo, que aportaron 17 y 15 puntos, respectivamente. En Argentina el mejor exponente fue, cuándo no, Luis Scola, que terminó con 26 unidades y 13 rebotes, pero la reacción para doblegar a los celestes fue producto de la conexión Facundo Campazzo-Andrés Nocioni. Entre ambos se pusieron el equipo al hombro en el último cuarto, y con certezas en ataque inclinaron el juego a su favor. El Preolímpico continúa hoy con cuatro partidos; Uruguay jugará a las 20.00 con Canadá.

Dio un gusto enorme ver jugar a Uruguay. Era difícil. Teniendo en cuenta que el básquetbol es un deporte bastante previsible, a priori era impensable que el juego se planteara de esa forma. Los celestes de Adrián Capelli empezaron jugando con Martín Osimani, Bruno Fitipaldo, Mauricio Aguiar, Mathías Calfani y Reque Newsome; el único cambio fue el del pivot yanqui Kiril Wachsmann, que quedó en el banco. De arranque se vio un quinteto concentrado, bien cerrado en su pintura, bloqueando todo lo que no fuera juego de Scola. Y le salió notable, porque si bien Scola marcó su habitual goleo, el resto no encontraba el aro ni de media ni de larga distancia.

El quiebre se produjo en el tercer cuarto. Uruguay llegó con una ventaja de 7 puntos, 44-37, pero los argentinos, gracias a los ingresos de Leo Mainoldi y Nicolás Richoti, al fin pudieron meter bolas desde el triple y se enchufaron. Eso hizo que el equipo de Capelli se replanteara la defensa al tener que salir más arriba para marcar los tiros exteriores. Ida y vuelta -los argentinos tampoco podían frenar el buen juego práctico de Uruguay-, ambas selecciones se alternaron en comandar el tanteador y terminaron ese tercer chico 67-66.

El final fue impresionante. Lo de Calfani, aun sintiendo el desgaste físico, seguía impactando. Por citar una: la picó en el corazón de la pintura y voló directo al aro para hundirla con vehemencia ante la marca de dos argentinos. Martín Osimani estaba enchufado y encontró buenos tiros; Aguiar también, pero Argentina se adelantó con puntos de Nocioni y ya no bajó. El Chapu sentenció desde la línea del personal un partido que en algún momento el equipo albiceleste temió perder. Una pena la derrota, y ahora el panorama para Uruguay será cuesta arriba, ya que no suma puntos en esta segunda fase.

Tanto el campeón como el segundo del Preolímpico se clasificarán a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. El tercero, el cuarto y el quinto tendrán la chance de jugar el Torneo Preolímpico FIBA 2016 junto a otras 15 selecciones del mundo: cinco europeas, tres asiáticas, Nueva Zelanda por Oceanía, y Angola, Túnez y Senegal por África.