Con la baja del Cebolla Cristian Rodríguez, que arribó a Panamá con una lesión muscular que no le permitirá jugar ni mañana ni el martes contra Costa Rica, la selección uruguaya se sigue preparando para su duelo de mañana contra Panamá, encuentro que se jugará a las 22.30 de Uruguay en el estadio Rommel Fernández, de la capital panameña.
Ayer, mientras el Cebolla estaba volviendo a Buenos Aires para seguir su recuperación con la sanidad de su club, Independiente, los 21 jugadores que conforman ahora el plantel celeste realizaron un entrenamiento en el escenario del encuentro de mañana. Si bien el técnico Óscar Washington Tabárez no confirmó el equipo, hay varios puestos seguros. Fernando Muslera será el arquero; en el fondo jugarán Maximiliano Pereira, Diego Godín, José María Giménez y Martín Cáceres. En la zona de volantes, el doble cinco lo conformarán Egidio Arévalo Ríos y el Tata Álvaro González, de muy buen rendimiento en la Copa América de Chile, y por la derecha irá Carlos Sánchez; algo más adelantado, como media punta jugaría Diego Rolan, y los delanteros netos serían Jonathan Rodríguez y Christian Stuani.
La prueba de mañana será importante para el cuerpo técnico, ya que será el penúltimo partido antes del estreno en las eliminatorias contra Bolivia. El último encuentro de preparación para los nuestros será el martes, a las 23.00 de Uruguay, contra Costa Rica en San José, la capital tica. Con respecto al rival de mañana de los celestes, vienen de tener una buena gestión en la Copa de Oro de la Concacaf, en la que culminaron en el tercer lugar, tras ser eliminados por México, encuentro unánimemente calificado como un robo escandoloso contra los panameños. El conjunto panameño está dirigido técnicamente por el colombiano Hernán Bolillo Gómez, y en la lista de convocados para el partido de mañana se encuentra el arquero de Nacional Luis Manotas Mejía.
El proceso boliviano
Mañana, en la ciudad estadounidense de Houston, la selección de Bolivia enfrentará a la de Argentina, encuentro en el que los del altiplano tendrán el estreno en la dirección técnica de Julio César Baldivieso, designado hace menos de una semana. Los bolivianos, que serán el primer rival de Uruguay en las eliminatorias, el 8 de octubre, en La Paz, están sumidos en una profunda crisis dirigencial y deportiva; de ahí la situación caótica en la que se decidió contratar a Baldivieso. Luego de la Copa América, en julio, fue detenido y posteriormente encarcelado, acusado de estafa, el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Carlos Chávez, quien además era tesorero de la Confederación Sudamericana de Fútbol. Esta situación retrasó la designación del técnico de la selección, luego de la renuncia de Mauricio Soria, y la situación recién se resolvió hace pocos días, con la designación de Baldivieso.
El flamante entrenador, ex jugador de la selección boliviana, declaró que habría preferido no tener que jugar el encuentro de mañana contra los argentinos, pero el compromiso ya estaba asumido desde hacía tiempo, por lo que no le quedó otra que encarar el duelo, en el que presentará una alineación sin mayores sorpresas, bastante similar a la que jugó la Copa América de Chile. Según se anuncia, los bolivianos comenzarían jugando hoy con Daniel Vaca; Ronald Eguino, Ronald Raldes y Edward Zenteno; Miguel Hurtado, Alejandro Meleán, Danny Bejarano, Martín Smedberg y Rudy Cardozo; Juan Carlos Arce y Marcelo Moreno Martins. De no ocurrir nada extraño, una oncena bastante similar será la que comience enfrentando a Uruguay en La Paz dentro de poco más de un mes.