Desde el viernes 15 y hasta el domingo 17, Malvín tendrá un nuevo desafío a nivel internacional. Con sede en la ciudad de Santiago de los Caballeros, la segunda ciudad más importante de República Dominicana, el conjunto playero participará en el grupo A de la Liga de las Américas, en el que sus rivales serán los Metros locales, Mogi das Cruzes de Brasil y Leones de Quilpue de Chile. Malvín debutará el 15 con los brasileños, al día siguiente jugará con Leones de Quilpue y cerrará la serie enfrentando a los locales el domingo 17. Pasarán a la siguiente ronda los dos primeros equipos del grupo.

Luego de que juegue Malvín, durante los tres fines de semana siguientes se desarrollarán las otras series que completan la primera fase. En el grupo B, que se celebrará en Santiago del Estero (Argentina) estarán Quimsa, conjunto local; el actual campeón, Baurú de Brasil; Marinos de Venezuela, y Toros de Nicaragua. La ciudad de Colón, en Panamá, albergará la serie C, en la que jugarán el local Correcaminos, Flamengo de Brasil, Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia de Argentina y Águilas de Colombia. Por último se disputará el grupo D en Barquisimeto, Venezuela. Allí Los Guaros harán de locales y tendrán como adversarios a Uniceub de Brasil, Capitanes de Puerto Rico y Capitalinos de Cuba.

La palabra azul

Para Pablo López, entrenador de Malvín, alternar la competencia entre torneo local y Liga de las Américas no presupone muchos cambios. En diálogo con la diaria, López dijo que la novedad pasaría por si se logra llevar un jugador más para reforzar el plantel. “Pretendemos otro extranjero, preferentemente un cinco. Malvín ante estos eventos siempre prioriza ir con el plantel propio. Por eso no queremos cualquier jugador, ante eso es preferible darles minutos a los jóvenes. Sí nos falta un cinco para recambio de lo que hay. Lo demás está armado”, dijo el entrenador.

Luego de unos días de descanso, hoy el plantel malvinense retomará los entrenamientos . “Los jugadores necesitaban descanso”, sintetizó López. Hoy llegarán los estadounidenses, mientras que Federico Bavosi retornará mañana desde España. El resto está a la orden, y el viernes volverán a la acción a nivel local para enfrentar en su cancha a Larre Borges por la octava fecha de la Súper Liga, mientras que el domingo completarán el pico con Hebraica y Macabi, en juego correspondiente a la sexta fecha que fue suspendido por filtraciones de agua en el escenario malvinense.

De cara a la Liga de las Américas, Malvín tendrá la tranquilidad de que no hay jugadores lesionados. Mathías Calfani fue el último en recuperarse, pero ya está al 100%. El técnico azul confía en los suyos para cumplir con la primera expectativa: tratar de clasificar a la segunda fase del torneo. “Sería bien importante para el club, porque permite avanzar en el crecimiento”, señaló López. Malvín jugó el año pasado la Liga y, tras vencer a Pioneros de Puerto Rico y a los Leones de Chile, perdió con Flamengo de Brasil; como Pioneros había vencido a los brasileños, el conjunto azul quedó afuera por diferencia de tantos. Al respecto, el entrenador sostuvo que la consolidación de su equipo en el plano internacional es un objetivo que el club se tiene que plantear. “Con cohesión, con un Malvín competitivo, con una organización acorde a una mentalidad ganadora, podemos alcanzar el más alto nivel”, dijo con certeza López.

En cuanto a los rivales, esta parada internacional siempre es brava. El comienzo es contra los brasileños de Mogi das Cruzes, un rival duro, que siempre está en las definiciones de los torneos en su país y que en alguna ocasión ha definido a nivel internacional. El devenir del fixture le impone a Malvín que a continuación del debut se enfrente con los chilenos, y el cierre será con los locales. Pablo López la tiene clara: “Mogi das Cruzes está fuerte, mejoraron con referencia al año pasado. Cambiaron al entrenador, pero fortalecieron el plantel con un interno más de calidad y con Larry Taylor, que le da profundidad en la base. Pero todos serán equipos competitivos. A este nivel no podés regalar nada, no existen los equipos, como en algunos casos de la Liga Sudamericana, con los que te podés relajar y ganar igual. El local siempre está lleno de talento. Hay que ver con qué jugadores de los que estuvieron en la final local se quedan, porque siempre se mueven mucho. En algunos casos fueron para Venezuela, otros a México, Eloy Vargas está jugando acá. Pero llegan estos torneos y se arman. No tienen liga fuerte pero tiene jugadores por todo el mundo. Reclutan tres extranjeros fuertes y, para el básquetbol que juegan, que es un poco más libre que el nuestro, se arman en menos tiempo, porque, entre otras cosas, tienen mucho talento. Y los chilenos mejoraron mucho. Es un equipo consistente, el año pasado los enfrentamos por la Liga de las Américas y fue un partido bastante parejo”.