La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) ratificó y comunicó ayer oficialmente la decisión de cambiar el calendario actual de la Copa Libertadores de América y de la Copa Sudamericana para la temporada que viene. La determinación llegó luego de la reunión que se realizó el fin de semana en Bogotá, en la que participaron todos los presidentes de las asociaciones miembros de la entidad rectora del fútbol sudamericano.

El 2017 vendrá con cambios grandes en los dos torneos de clubes que se disputan en Sudamérica. Una de las cosas más notorias será la variación del calendario: la Libertadores tendrá un formato prácticamente anual, jugándose desde fines de enero hasta finales de noviembre o comienzos de diciembre (unas 42 semanas de duración, 15 más que en las últimas ediciones). La Sudamericana, mientras tanto, se jugará desde marzo hasta diciembre. Según el presidente de la Conmebol, el paraguayo Alejandro Domínguez, “el objetivo de estas reformas es potenciar el fútbol sudamericano por medio de una estrategia integral que permita generar y reinvertir más valor en pro de su desarrollo. El calendario anual aprobado nos permitirá fomentar la calidad de los torneos locales de cada país y elevar los estándares de las competiciones continentales para ser más competitivos a nivel global”.

La nueva forma de disputa trae implícita la participación de más equipos. Desde el año que viene serán 44 los clubes que jugarán la Libertadores, y ya no 38 como hasta ahora. En tal sentido, la Conmebol anunció cómo se repartirán esos seis nuevos cupos: dos serán para Brasil y uno para Argentina, Colombia y Chile (en todos los casos, la federación de cada país deberá formular la forma de clasificación local). El cupo restante corresponde al campeón de la Copa Sudamericana. Al respecto, la Conmebol informó que esta “asignación fue definida de forma unánime por el Consejo Ejecutivo con base en un análisis técnico, entre los cuales se contemplaron criterios comerciales y deportivos, incluyendo el número de equipos representados relativo a la población total y el tamaño del mercado, entre otras”.

Por su parte, la Sudamericana también verá acrecentada la participación de equipos: ahora serán 54 los clubes que jueguen el segundo torneo en importancia del continente. En la división de los equipos por países, Argentina y Brasil tendrán seis clubes y el resto de los países sudamericanos tendrá cuatro.

Enlazados

Tal cual había trascendido la semana pasada cuando aún la idea no estaba laudada por los directivos sudamericanos, el Consejo Ejecutivo de la Conmebol aprobó la propuesta de que diez equipos que arranquen jugando la Copa Libertadores y que no avancen a los octavos de final “desciendan” a la Sudamericana ya empezada. Las diez plazas serán cubiertas por los ocho mejores terceros de la fase de grupos de la Libertadores más los dos mejores clubes de la fase preclasificatoria.

La Libertadores tendrá, antes de la fase de grupos, dos fases preliminares. En una primera instancia, 16 clubes se emparejarán y disputarán ocho llaves de eliminación directa ida y vuelta. Los ocho que clasifiquen jugarán una nueva etapa eliminatoria y los cuatro ganadores pasarán a integrar la fase de grupos, donde también estarán los 26 clasificados directamente más los campeones del año anterior de la propia copa (Atlético Nacional de Medellín en este caso) y también el campeón de la Sudamericana (torneo que se encuentra actualmente en disputa).

Así como varias cosas ya parecen estar resueltas, hay otras que restan por definirse. Y no son menores: una es confirmar la forma de disputa de la Sudamericana, torneo que no queda claro si tendrá fase de grupos o seguirá disputándose en eliminatorias mano a mano como hasta ahora. También queda por definir la forma en que se jugará la final de la Libertadores. Si bien la tendencia de los dirigentes de la Conmebol es jugar una sola final en cancha neutral previamente definida, esto no ha sido confirmado.

La próxima reunión de los presidentes de la Conmebol será el 17 de octubre. Ahí los directivos sudamericanos se reunirán con los clubes clasificados a la Libertadores 2017 con la finalidad de compartir e informar sobre los cambios que se vendrán. Seguramente luego de dicha reunión quedarán plenamente definidos los detalles que aún quedan por ajustar.