Plaza Colonia sigue siendo la sensación del Clausura y el equipo que lucha contra todo. Los patas blancas no sólo pelean el actual torneo, sino que en cada partido buscan sumar en todas las tablas. Por eso el empate en la tarde sabatina del Parque Rodó no les cae tan mal. En el Clausura están a un punto de Peñarol (lo enfrentan en la penúltima fecha), siguen en zona de clasificación a copas internacionales (algo inédito) y además ya consiguieron su principal objetivo al comienzo de la temporada, salvarse del descenso. Para los violetas el momento es bien distinto, porque están a ocho puntos de los puestos de copas y no tienen chances de pelear por el Clausura, algo anormal para el equipo de Punta Carretas. De cualquier forma, Eduardo Acevedo ha logrado cambiarle la cara al equipo y lo potencia en cada partido. Por momentos Defensor mereció mejor suerte ante Plaza, y estuvo a punto de irse victorioso. El primer tiempo en el Franzini fue todo para el local, que basó su juego en la verticalidad y en la firmeza en el fondo. Se destacó la gran vuelta de Guillermo de los Santos, titular por primera vez desde su rotura de ligamentos en setiembre del año pasado.

Para el complemento la tónica siguió igual. Los tuertos pararon un 4-2-3-1 con Maximiliano Gómez como referencia de área y con Felipe Rodríguez, Nicolás Olivera y Facundo Castro viniendo desde más atrás. La fórmula tuvo éxito, porque a los 10 minutos Nico dejó solo a Facundo Castro para el gol, pero tapó bien el arquero Kevin Dawson. En el rebote pasó de todo hasta que la pelota le quedó a Felipe Rodríguez, que enganchó y la pudrió arriba, sin que nadie pudiese alcanzarla.

Todo iba bien para Defensor, hasta que De los Santos sufrió un golpe en la zona abdominal y Acevedo debió sustituirlo y pasar a un 4-4-2. El equipo perdió marca y velocidad y Plaza se fue con todo arriba. A los 60 llegó el primer aviso de Nicolás Dibble, con un bombazo que Yonathan Irrazábal tapó muy bien, pero el arquero falló unos minutos después. El zaguero Carlos Rodríguez cabeceó hacia atrás y la pelota era segura del Mono, pero se le escapó: quedó picando en el área y apareció Federico Puppo para empujarla de cabeza.

Con el empate, Eduardo Espinel se la jugó para recuperar la punta y su equipo casi lo gana, otra vez con un remate de Dibble que tapó Irrazábal. En los minutos finales los dos estuvieron en su mejor versión, pero la falta de precisión los castigó a ambos.