Con el partido que jugarán Estados Unidos y Colombia mañana a las 22.30 en el Levi‘s Stadium de la localidad californiana de Santa Clara, cercana a San Francisco, se pondrá en marcha la Copa América Centenario.

El equipo local que dirige el alemán Jürgen Klinsmann tiene buenas expectativas depositadas en este torneo, que será el evento futbolístico más importante organizado en territorio estadounidense después del Mundial de 1994. Enfrente los yanquis tendrán a la escuadra del argentino José Néstor Pékerman, que en este torneo dejará de lado la camiseta amarilla y se vestirá con una de color blanco, en homenaje a la indumentaria utilizada por Colombia en la primera Copa América en la que participó, en 1945.

El sábado se estrenará en el torneo la titubeante selección brasileña orientada por Dunga, que tendrá como primer rival a Ecuador, líder de las Eliminatorias junto a Uruguay. Los verdeamarelos tendrán su potencial ofensivo sensiblemente menguado en el certamen porque no contarán con Neymar -quien sí representará a Brasil en los Juegos Olímpicos luego de un acuerdo al que llegaron los dirigentes norteños con sus pares de Barcelona- y tampoco con el atacante zurdo de Bayern Munich Douglas Costa, que se perderá la copa por una lesión muscular.

Otros ausentes que tendrá la Copa América Centenario serán el volante paraguayo Néstor Ortigoza y el arquero costarricense Keylor Navas, recientemente consagrado campeón de la Champions League con Real Madrid, que no podrá participar en el torneo por una dolencia en el tendón de Aquiles que arrastra desde hace largo tiempo.

El que no se perderá la copa a pesar de su lesión es el salteño Luis Suárez, que ya está en la ciudad de Phoenix con el plantel celeste, cuya mayor parte viajó a Estados Unidos ayer de tarde desde Montevideo. Hoy el grupo comandado por Óscar Washington Tabárez realizará su primer movimiento en territorio estadounidense y seguramente mañana haya un ensayo táctico en el que se podrá ver la alineación que comenzará jugando en el debut con México el domingo a las 21.00.

Hablando de los mexicanos, anoche al cierre de esta edición estaban jugando su último amistoso previo a la Copa América ante la selección chilena en la ciudad estadounidense de San Diego, partido en el que los hinchas aztecas llenaron el estadio, escena que se volverá a repetir en el torneo cada vez que juegue el tri.

Otra interpretación

Ayer entraron en vigencia varias modificaciones a la interpretación del reglamento del juego, impulsadas por la International Football Association Board -entidad conformada por las cuatro asociaciones de fútbol de Reino Unido y la FIFA-, que serán puestas a prueba durante un año y que regirán en todas las competiciones, incluyendo, claro está, la Copa América Centenario. Uno de los principales cambios es que los árbitros podrán apelar a repeticiones de las jugadas para analizar incidencias sobre goles, tarjetas rojas, penales o problemas para identificar a jugadores. Además, estará prohibido detener la carrera previa a la ejecución de los tiros penales. El jugador que así lo haga podrá ser amonestado, así como los arqueros que se adelanten de la línea de gol antes del tiro. También hay variantes respecto del offside. A partir de ahora no se podrá decir que un futbolista está en posición adelantada por un brazo o una pierna. Las extremidades no serán tenidas en cuenta a la hora de considerar si hay posición antirreglamentaria.

Con respecto a las sustituciones, entró en vigencia la opción de realizar un cuarto cambio, aunque esta posibilidad sólo regirá durante los alargues.