En el recién finalizado Sudamericano de Venezuela, directivos de Fiba Américas confirmaron la innovadora forma de disputa. Para las selecciones sudamericanas fue en ese torneo -el último de su tipo- que se puso en práctica por primera vez el nuevo sistema: los cinco equipos que ocuparon las mejores posiciones se clasificaron directamente a la División A de las eliminatorias a China 2019, serie en la que se enfrentarán a otras 11 selecciones del continente. Uruguay está adentro por haber salido tercero. Aún no se sabe contra quiénes se jugará, pero sí qué selecciones integran la Divisional A: Canadá, Estados Unidos, Puerto Rico, México, República Dominicana, Panamá, Islas Vírgenes, Venezuela, Brasil, Argentina y Colombia, más los cuatro que salgan de un repechaje que se jugará entre Antigua y Barbuda, Bolivia, Chile, Cuba, Nicaragua y Paraguay. América también tendrá una Divisional B, con el resto de equipos del continente y los dos eliminados del repechaje, que funcionará como divisional de ascenso.

Así será

La nueva Copa del Mundo aumentará el cupo. Tal como ocurrió tiempo atrás con el fútbol, el básquetbol pasará de 24 a 32 selecciones en el Mundial. Esa medida habilita que por América se clasifiquen siete selecciones en lugar de cuatro, como hasta ahora.

Los siete que pueden ir al Mundial saldrán de la Divisional A. En la primera instancia de competencias, los 16 equipos clasificados se agruparán en cuatro series de cuatro selecciones cada una. Cada grupo jugará en formato de local y visitante entre noviembre de 2017 y junio de 2018. Alberto García, director ejecutivo de Fiba Américas, declaró en Venezuela: “Seguramente, la primera fase la armaremos regionalmente, es decir, por zonas, para que los viajes no sean tan largos”.

Los tres mejores equipos de cada serie pasarán a la segunda fase. Esta se disputará con dos series de seis equipos cada una, y todas las selecciones llevarán consigo los resultados de la primera ronda. La segunda fase se desarrollará entre setiembre de 2018 y febrero de 2019. Los tres primeros de cada grupo y el mejor cuarto se clasificarán al Mundial de China 2019.

Todo atado

La Copa del Mundo de China 2019 clasificará a siete selecciones para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, por lo que el viejo campeonato Preolímpico también será historia. Las clasificadas al evento olímpico no serán las siete primeras selecciones, sino que primará la clasificación por región: los dos primeros de América y Europa, más uno de África, uno de Asia y otro de Oceanía. Japón, por ser el organizador de los Juegos Olímpicos, podría estar clasificado, pero la Fiba aún no lo confirmó.

Habiendo dejado atrás la antigua modalidad, ya sin Sudamericano ni Preolímpico, la escena continental la cubrirá la Copa América 2021. En este torneo participarán 12 equipos, divididos en dos grupos de seis. Se clasificarán a la segunda fase los cuatro mejores de cada grupo, y se jugarán play off hasta el final.

No es menor

Hay otro cambio significativo en el básquetbol mundial: la Fiba decidió que la Copa del Mundo se dispute en 2019, y no en 2018, para que no coincida con el Mundial de fútbol de Rusia, lo que permitirá captar en mayor medida la atención mediática y tener una cobertura más amplia del evento.

Como todo cambio en disputas internacionales, la nueva modalidad salpicará para adentro. Será necesario manejar bien las posibilidades que sugerirán los nuevos calendarios y adecuar la competencia de la Liga Uruguaya de Básquetbol para que no entorpezca la preparación de la selección celeste.

Marcelo Signorelli -el entrenador que llevó a Uruguay a estar en la Divisional A, en virtud de la medalla de bronce obtenida en el Sudamericano de Venezuela, pero que aún sigue a la espera de que la dirigencia de la Federación Uruguaya de Basket-Ball le confirme si le renueva el contrato- considera que el nuevo formato del básquetbol mundial favorece a la celeste. “Tenemos más chance de ir al Mundial. Antes ibas a un Premundial y tenías menos cupos. Al ampliarse, ya nos favorece, sin lugar a dudas. No van a ser fáciles los grupos que nos toquen, pero si de cuatro se clasifican tres a la segunda fase, tenés que ligar muy mal para no pasar. Ya en los bombos de seis va a ser durísimo; ahí te la tenés que jugar”, dijo el entrenador a la diaria. Signorelli también cree que favorece las chances celestes el hecho de que el nuevo formato de disputa sea en condición de local y visitante. En ese sentido, para jugar como local hay que tener una cancha con habilitación de la Fiba. Las posibilidades son varias: la construcción del Antel Arena, la reforma del estadio 8 de Junio de Paysandú, el Centro de Convenciones de Maldonado o, en menor medida, el Palacio Peñarol.

Otro interrogante que plantea el nuevo sistema internacional es si el mundo del básquetbol está preparado para ceder los jugadores en cada instancia en que las selecciones los necesiten. Como lo hace la FIFA, se instalarán las fechas Fiba. Eso, junto a la readecuación de los calendarios -en Europa se juegan ligas locales, Euroliga y Eurocup- es un paso ineludible.

Vale la aclaración: el nuevo calendario es sólo para mayores; en las categorías inferiores se seguirá participando en Sudamericanos y Premundiales.