Afectado por problemas pulmonares, falleció ayer en Río de Janeiro João Havelange, que en mayo había celebrado su cumpleaños número 100.

Abogado de profesión y mandamás de la FIFA durante 24 años, entre 1974 y 1998 el carioca Havelange estuvo además muy vinculado al movimiento olímpico, siendo primero representante brasileño en natación en los Juegos de Berlín de 1936 y en waterpolo en los celebrados en Helsinski en 1952 y luego integrante del Comité Olímpico Internacional (COI) durante más de 40 años.

La confirmación de su activa participación en casos de corrupción vinculados a cobros de millonarios sobornos lo forzó a renunciar a sus cargos honorarios en la FIFA y en el COI en los primeros años de esta década, ya siendo un nonagenario, lo cual lo llevó a perder prestigio y visibilidad en el entorno dirigencial del deporte mundial.

De hecho, el escenario central de los Juegos que se están desarrollando en Río de Janeiro, el comúnmente llamado por los cariocas Engenhão, originalmente se llamaba João Havelange, pero los organizadores, tomando distancia, impartieron la directiva de designarlo, a los efectos oficiales, fríamente como Estadio Olímpico.