Jhonatan Esquivel tiene hoy la regata más importante de los Juegos Olímpicos, a los efectos de cumplir con el objetivo que se propuso. A las 12.40 el remero celeste se largará en Lagoa en la competencia por Semifinales C/D. En esta regata de seis barcos, los mejores tres pasarán a la Final C, que definirá los puestos entre el 13º y el 18º. Justamente acceder a esa final y terminar lo más arriba posible es el objetivo del singlista uruguayo, que hasta ahora ha rendido de acuerdo con su propio plan. Las finales D y C se disputarán mañana a las 9.30 y 9.50, respectivamente. En una de ellas, Esquivel definirá su ubicación final como uno de los 24 mejores de Río de Janeiro 2016.

Por su parte, Dolores Moreira correrá hoy su séptima y octava regata, en las que intentará mejorar lo hecho hasta ahora. La sanducera ocupa el 27º lugar de la clasificación general, y su objetivo es estar 20ª. Su participación en estos Juegos Olímpicos se completará mañana, cuando se disputen las dos últimas regatas antes de la Medal Race, a la que sólo accederán las diez mejores posicionadas.

El que finalizó rápidamente su participación en Río fue el judoka Pablo Aprahamian, que en la categoría de menos de 100 kilos fue vencido ayer en forma categórica por el local Rafael Buzacarini.

La pista llama

Hoy comenzarán en Río de Janeiro, en doble turno, las pruebas de atletismo, una de las grandes atracciones olímpicas. A las 9.30 tendrá lugar la clasificación de lanzamiento de disco, prueba que inaugurará las competencias en el estadio Engenhão.

El horario nocturno comenzará a las 20.30 y contará con la presencia de un uruguayo que debutará un rato después, sobre las 21.20. El atleta Emiliano Lasa buscará igualar su récord nacional de salto largo (8,16 metros) para clasificarse de manera directa a la final de mañana, en la que la marca exigida es de 8,15 metros como mínimo. Si no lo consigue en ninguno de los tres intentos, Lasa podrá acceder igualmente a la definición por las medallas, siempre y cuando sea uno de los 12 mejor ubicados en la etapa clasificatoria.

En total, son 32 los competidores que estarán presentes y serán 12 los finalistas, a menos que sean más de 12 los que superen la marca de corte de 8,15 metros. Son 23 los que tienen mejores registros que el uruguayo en esta temporada, y siete los que han superado los 8,30 metros este año, entre ellos el estadounidense Jarrion Lawson, que marcó 8,58 en julio. No será fácil para Emiliano, pero superar los 8,15 para llegar a la final sólo depende de él.

Montado a una ilusión

El deportista ecuestre Néstor Nielsen será el debutante celeste, hoy a las 10.00, montado a Prince Royal Z de la Luz. Antes de partir rumbo a Río de Janeiro, el jinete manifestó a la diaria su intención de pelear por una medalla. Su caballo es joven y, con nueve años, es de los menos experimentados en esta prueba. Ese factor podría jugar en contra de Nielsen, pero él confía plenamente en sus posibilidades. Para mantener vivo el sueño deberá quedar entre los mejores 60 ubicados de 75 binomios en la primera jornada. De no lograrlo, quedará eliminado.

Pero mientras una participación se inicia, la de los veleristas uruguayos está cerca de llegar a su fin. Las tres categorías de vela en las que compiten los celestes terminarán entre mañana (láser radial) y el domingo (finn y nacra 17). Hasta ahora, los únicos que tienen alguna posibilidad cierta de prolongar su estadía en los Juegos Olímpicos son Pablo Defazio y Mariana Foglia, que en nacra 17 intentarán remontar puestos en la tabla para quedar al menos décimos y conseguir entrar en la Medal Race. Ni Alejandro Foglia ni Lola Moreira tienen posibilidades de conseguir ese objetivo.

Ayer Alejandro Foglia tuvo que enfrentarse con olas de más de dos pisos de alto, según contó a la diaria al salir del agua, tras la regata de la clase finn, que se desarrolló fuera de la bahía, frente a las costas de Copacabana. “Son unas condiciones que, la verdad, no son mis favoritas. Demasiado viento. No me sentí cómodo”, explicó Alejandro, que aseguró que con un viento tan intenso navegó sólo cuatro o cinco veces en su carrera a bordo de este barco. “Tal vez en ese sentido sí necesitaba un añito más de navegar con este viento”, aclaró luego de asegurar que se siente contento con el cambio de categoría que decidió hacer para estos Juegos Olímpicos. El mejor deportista celeste en Londres 2012 no está pasando por una buena semana y fue duro consigo mismo: “Van seis regatas de las cuales una fue decente, y las otras, un desastre”, dijo. Foglia completó las dos regatas de ayer en los puestos 20 y 21, y se ubicó 21º en la clasificación general entre 23 competidores.

Por otra parte, su hermana y su cuñado, Mariana Foglia y Pablo Defazio, tuvieron un día muy intenso, con cuatro regatas. Dos de ellas fueron buenas -finalizaron en las posiciones que ellos quieren promediar, 11º y 13º-, pero algunos errores tácticos y una penalización en la tercera regata les costaron malas presentaciones en las dos restantes, en las que llegaron en el puesto 17 y 19, respectivamente.

El rendimiento global, disputadas las primeras seis regatas, los sitúa en el lugar 19 de la clasificación, entre 20 barcos. De todas formas, todavía les quedan seis carreras para buscar su objetivo de acceder a la Medal Race. “Estos días son difíciles, pero lo son para todos, no sólo para nosotros”, dijo Defazio al explicar que nadie ha podido mantener un rendimiento parejo. “En una regata podés descontar siete puntos”, agregó. Por el momento, están a 20 puntos del 10º puesto, que es su objetivo. “Para el tripulante hoy fue un día súper exigente. Lo bueno es que mañana es un día libre y podemos recuperarnos y llegar al próximo día frescos”, explicó Mariana, la tripulante del nacra celeste. El matrimonio olímpico todavía está a tiempo de enderezar el rumbo. Ojalá los buenos vientos los acompañen.