Todo comenzó el 3 de setiembre, cuando el criminal antes desconocido y ahora conocido como el Pato Feo fue rescatado de un instituto médico por otros malhechores, comenzando una ola delictiva que terminó el fin de semana, cuando la Policía le dio captura antes de que pudiera convertirse en un hermoso cisne.

El Pato cometía los delitos a cara descubierta, cual Omar Little en The Wire, y gracias a su hermana descubrimos el motivo: quería ser reconocido y contar su verdad en un libro que escribió en prisión, titulado “Diario íntimo de un delincuente”.Mientras los editores se matan a balazos por llamar su atención, el Ministerio del Interior teme que esta conducta se repita en otros escritores, la mayoría de ellos consumidos por la pobreza y la falta de reconocimiento. “Estaremos pendientes de lo que podría convertirse en una nueva modalidad delictiva: el golpe perpetrado por un escritor en su afán de ser el ‘nuevo Pato Feo’ y lograr la fama y la fortuna dentro de una inmunda celda”, dice el comunicado oficial.