Atrás quedaron las dudas, los cuestionamientos y las angustias. La cuerda por la que caminaba el director técnico Leonardo Ramos, que decían que estaba floja, ahora está más firme que nunca, y Peñarol parece difícil de vencer. Fue contundente la victoria sobre los capurrenses el sábado en el Campeón del Siglo, reflejo del buen momento del equipo que lidera el Clausura y aprieta en la Tabla Anual. El ritmo, la tenencia de balón y el orden táctico fueron fundamentales para que el carbonero le ganara con autoridad a un pálido Fénix y olvidara los fantasmas del pasado reciente.

De arranque, nomás, una arremetida de Guillermo Varela por la derecha terminó en penal. El lateral mandó el centro y en el camino se encontró con la mano de Raúl Ferro, adentro del área, que intentó cubrirse. El encargado de ejecutarlo fue el argentino Lucas Viatri, pero su remate al medio fue desviado por Darío Denis, que se volcó a su derecha pero dejó el pie estirado. No obstante, la chance malograda no cambió en nada la tónica general del partido.

Ramos tuvo que mover algunas piezas en su 4-4-2, ya que no contaba con el Cebolla Cristian Rodríguez ni con el Chiche Mathías Corujo, que fueron citados para integrar el plantel de la selección uruguaya. Diego Rossi se paró en la mitad de cancha por la derecha y Gastón Rodríguez lo hizo por la izquierda, aunque con un poco más de proyección hacia el centro. Ambos cumplieron. Con la subida de Lucas Hernández y Guillermo Varela en los laterales, Peñarol llegaba siempre en superioridad numérica y las chances de gol comenzaron a abundar.

Los problemas de Fénix estuvieron sobre todo en la defensa. La línea de tres ensayada por Gustavo Ferrín tuvo varios inconvenientes para cerrarse adecuadamente, y aparecieron huecos que fueron aprovechados por el local. A los 24 minutos el carbonero logró abrir el marcador con un gol de cabeza de Viatri tras un preciso centro de Hernández. El delantero, titular desde la primera fecha, estuvo 475 minutos sin poder convertir, por eso en el festejo se sacó toda la bronca.

Con el viento a favor, Peñarol siguió empujando y no demoró en encontrar el segundo. Otra vez provino de un centro de Hernández y la segunda pelota le quedó servida a Maximiliano Rodríguez, que mandó otro centro. Por arriba la encontró Ramón Arias, que cabeceó fuerte y abajo, pero dio en el palo. En el rebote apareció Fabricio Formiliano y la empujó a la red.

Con varios minutos por jugar, el equipo de Ramos siguió generando situaciones de gol y tuvo algunas oportunidades de ampliar la diferencia. Un remate de Maxi Rodríguez dio en el vertical derecho, y un tiro libre del Mota Walter Gargano se estrelló en el horizontal.

Fénix entró con otra actitud al complemento y tuvo la única chance del partido: un disparo de Maximiliano Cantera que desvió el arquero Kevin Dawson. Todo mal para el capurrense, porque enseguida de esa jugada llegó el tercero aurinegro. Esta vez la jugada fue por la izquierda y Hernández mandó un centro rastrero que la defensa albivioleta pifió. Como el más vivo de todos apareció el juvenil Rossi y la mandó guardar.

Faltaba bastante por jugar y Ramos optó por mover fichas. Cristian Palacios ingresó en lugar de Viatri, mientras que el pibe Franco Martínez debutó en el equipo en reemplazo de Gargano y cumplió una gran tarea. Las expulsiones de Arias en Peñarol y de Martín González en Fénix obligaron a los entrenadores a hacer sendas rotaciones en sus equipos, pero para los carboneros el partido estaba casi cerrado. Por una cuestión de puntería, y por buenas intervenciones de Denis, el partido culminó solamente 3-0.